El conselleiro anunció ayer otros 450.000 euros para conservación de la iglesia
15 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.«Intención de que se leve a cabo unha posta en valor teñen todas as partes: a Xunta, o concelleiro que estivo alí tamén mostrou interese e a Deputación. Agora que non é doado porque fan falta moitos convenios entre administracións, co propietario que ten a concesión...», explicaba ayer el arqueólogo Emilio Ramil, tras la visita a Moraime del conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, que visitó el yacimiento y anunció una inversión de 456.762 euros para obras de conservación de las fachadas de la iglesia. Importe que se suma a los 444.945 euros destinados a este conjunto patrimonial desde el 2009.
Cultura, pese a esa actitud favorable a la puesta en valor, por el momento no se pronuncia de manera explícita respecto al futuro del yacimiento. Explica que se está a realizar el estudio arqueológico que incluirá «un levantamento fotogramétrico das estruturas atopadas que formará parte da correspondente memoria técnica que dará conta do estado de conservación destes restos». Un trabajo valorado en 16.940 euros que lleva a cabo la empresa de Ramil y que será la base para que la Xunta tome una decisión definitiva respecto al futuro del enclave. Ahora, de manera inmediata -de hecho empezarán hoy mismo- lo que procede es cubrir los restos con geotextil, un material empleado como aislante en la construcción, y taparlos con tierra para su conservación.
En cuanto a los planes para este próximo 2019 lo más destacado, como dijo ayer el conselleiro, son las obras de la iglesia, dentro de un objetivo global que pasa por «traballar sobre este conxunto co fin de garantir a protección do xacemento e a permanencia do inmoble e do patrimonio artístico que atesoura, aumentado así o seu interese turístico».
Rodríguez, que estuvo acompañado por la directora xeral de Patrimonio Cultural, María del Carmen Martínez; el delegado territorial de la Xunta en la provincia, Ovidio Rodeiro, y por los concejales Iago Toba y Sandra Vilela o el párroco, Ramón Insua, entre otros; puso en valor el esfuerzo económico realizado por el Gobierno autonómico en Moraime a lo largo de los últimos 10 años, que superará los 900.000 euros en cuanto se lleve a cabo este nuevo plan de conservación de la iglesia, para el que está prevista la licitación del proyecto básico y de ejecución el próximo año.
En ese capítulo hizo especial hincapié en los 50.000 euros cofinanciados con fondos Feder, que sirvieron para la restauración de los frescos del muro norte, concretamente para la limpieza de la superficie, aplicación de tratamientos contra el biodeterioro, consolidación del soporte y reintegración de la policromía, además de la retirada de capas de mortero antiguas. Una actuación que despertó el interés tanto del conselleiro como del resto de participantes en la visita por su excelente resultado.
A nivel local, tanto el concejal Iago Toba, que representó al gobierno, como la portavoz popular, Sandra Vilela, dejaron claro que llevar a cabo una actuación relevante en Moraime va a ser una prioridad. Toba al que ya todos dan por sustituto de Félix Porto aunque no sea aún oficial, señala que el conselleiro le trasladó una «impresión positiva de colaboración» y le adelantó que el Concello va a «tomar a iniciativa» porque pretenden «aproveitar este tirón» y, una vez que la parte provincial y municipal ya están comprometidas, confía en que la Xunta se sume.
«Temos que pelexar porque se faga alí un tema máis amplo, máis ambicioso, que pase por escavar e conservar», señaló Vilela.
La actuación de los arqueólogos deja claro «o potencial para a posta en valor»
El equipo de AXA Arqueoloxía cuenta con tener entregado su informe -pieza clave para que Cultura adopte cualquier decisión- en aproximadamente un mes. Por el momento, lo que se atreven a adelantar es que «queda constatado o potencial do xacemento arqueolóxico de Moraime, parcialmente arrasado na zona de escavación de Chamoso Lamas, pero con estruturas intactas ao redor».
Sus conclusiones preliminares apuntan a que «este espazo relata unha secuencia histórica moi interesante e ilustrativa, que comeza coa construción dunha vila romana, da cal se atoparon restos estruturais e materiais. Esta foi continuada por un xacemento tardo antigo, que se inicia cunha necrópole de fosas escavadas en substrato. Atópase tamén unha necrópole de tumbas de laxa de arco de paréntese do século VI-VIII e secuencia remata coa construción do mosteiro románico», del que será contemporánea la fuente monumental que se creía romana.