Las cinco metas del turismo en la Costa da Morte

Juan Ventura Lado Alvela
J. v. Lado CEE / LA VOZ

CARBALLO

JORGE PARRI

El trabajo que está a punto de presentar la CMAT incide en la calidad, la unión, los valores o la sostenibilidad

26 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Plan Estratéxico de Turismo de la Costa da Morte, que la empresa que lo elabora tiene previsto presentar a finales de mes a la directiva de la CMAT, marca cinco objetivos fundamentales a los que encaminar la gestión del sector en los próximos años. Aunque el contenido definitivo del trabajo aún no se conoce, sí existe un avance que fue hecho público la semana pasada y que deja entrever por dónde van las líneas fundamentales.

Reconocible por la calidad

El proyecto propone un trabajo «na mellora continua da calidade dos servizos turísticos, tanto públicos coma privados». Para ello, las líneas básicas de trabajo inciden en la profesionalización y en mecanismos para elevar y homogeneizar la calidad del servicio prestado, pero también se incide en defender «a legalidade das actividades turísticas» y velar por la «responsabilidade social, a integración e accesibilidade». También pone el acento en un valor fundamental al que generalmente no se le presta atención en estos análisis, que es «o papel de anfitrións dos habitantes da Costa da Morte, recoñecidos pola súa amabilidade e hospitalidade».

Modelo sostenible

El turismo, dice el plan, tiene que funcionar como «motor de desenvolvemento socioeconómico do territorio» y, por tanto, debe servir para apoyar y diversificar las economías rurales y pesqueras. De ahí que inste a trabajar para aumentar la generación de empleos indirectos lo que, en último término, servirá para fijar población. Dentro de esta estrategia, destaca la necesidad de desestacionalización para hacer rentables los negocios, pero también el fomento del «orgullo de pertenza á terra da Costa da Morte», que pasa por la divulgación y cuidado del patrimonio tanto material como inmaterial. En la misma línea se enmarca la lucha por el uso responsable de los recursos, tanto por parte de los vecinos como de los visitantes, a los que hay que enfocar medidas destinadas a reducir el impacto de las actividades turísticas.

Equilibrio

Evitar la masificación debe ser una de las principales apuestas de futuro, por lo que resulta preciso «impulsar iniciativas que contribúan a un reparto equitativo de fluxos turísticos no amplo territorio da Costa da Morte». Para ello el plan propone fomentar una promoción más equilibrada de todos los concellos de la zona, tendente a poner en valor los recursos que son menos conocidos y también las citas: deportivas, culturales, gastronómicas... que tienen un mayor impacto desestacionalizador. La consecución de estos objetivos pasa por fomentar la movilidad interna de los viajeros, que a su vez fomenta el aumento del gasto diario medio, y por centrar las campañas promocionales en temporada media y baja, fuera de los picos del verano o la Semana Santa.

Coordinación

Coordinación, visión global de destino turístico, sentimiento de pertenencia y unión, implicación de entidades... Las referencias del estudio son claras e identifican el funcionamiento poco menos que anárquico que tiene el sector tanto a nivel público como privado en estos momentos. Para paliarlo, el plan propone fomentar el asociacionismo entorno a la CMAT, impulsar la participación activa de todos los agentes implicados e incrementar la presencia de perfiles técnicos en las administraciones locales.

Consolidar la marca

Lo primero que dicen las recomendaciones del estudio es que hay que velar por «unha única imaxe de marca da Costa Morte», ya que cuenta con unos valores asentados de autenticidad e identidad. A partir de ahí, los instrumentos para reforzarla son muchos. Van desde los productos turísticos hasta el enfoque de la comercialización hacia distintos mercados prioritarios.