Un día como hoy, en el 2003, los andamios rodeaban la torre, en una imagen insólita
16 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.«El faro de Cabo Vilán, una de las guías marítimas más importantes de Galicia y España, está siendo sometido a un proceloso sistema de encintado y sellado de grietas», informaba La Voz a estas alturas del año, en el 2003. Aquel 16 de septiembre se daba cuenta de que esta sería la primera gran mejora que se le aplicaba al faro en cien años, y así lo explicaba el entonces torrero titular, Antonio Jesús Alonso Ballester. El paso del tiempo había devenido en grietas y hendiduras que propiciaban la entrada de agua. También se repicaban y arreglaban las paredes del edificio principal. La sirena, por otra parte, llevaba tes años estropeada.
Contrató la obra la Autoridad Portuaria de A Coruña y, ese día de hace 15 años, ya los operarios tenían colocados andamios y aparejos. No había sido nada fácil, por lo abrupto del terreno y su pendiente, que dilataron la instalación. Alonso señalaba lo «importante» de esta reforma para el faro, el primero eléctrico de España, construido en el año 1896.