Las medidas para frenar excesos en las verbenas son aún ineficaces

M. L. / J. V. L. CARBALLO, CEE / LA VOZ

CARBALLO

BASILIO BELLO

Aunque se ven mejoras, ni la seguridad privada parece hacer mella en los botellones

19 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Cámbiese «rock and roll» por «reggaeton» y la santa trinidad de «sexo, drogas y rock and roll» es perfectamente aplicable a alguna verbena gallega. El desfase está ahí, quiera o no quiera verse, y en algunas celebraciones está originando problemas reales. De ahí que comisiones y concellos se están poniendo las pilas implantando diferentes medidas de prevención y control para que los excesos propios de este tipo de fiestas no se salgan de madre. El resultado es a veces palpable, aunque lejos de resultar drástico.

De las primeras cosas que han probado algunas comisiones, pese a su coste, es la contratación de seguridad privada. Se valla el recinto en cuestión y se coloca personal en cada entrada para evitar que se acceda al espacio con botellas o con vasos de cristal que puedan provocar cortes indeseados. ¿El problema? Que si no se puede hacer botellón dentro de la fiesta, habrá seguramente algún lugar en los aledaños en el que poder sentarse a beber. Pasó en Suxo (Muxía), algún año en A Pereiriña (Cee) y en Malpica, donde esta política lleva ya implantada algún tiempo. También sucedió en el Asalto ao Castelo, aunque con el paso de las ediciones el botellón ha ido mermando hasta ser casi residual.

Sin embargo, en muchos casos la seguridad privada no siempre da los frutos deseados en lo que a alcohol se refiere aunque, dicen los responsables de alguna comisión, sí resultan muy eficaces a la hora de minimizar altercados.

Gastos inviables

A las comisiones que no pueden afrontar los gastos de estas medidas, les queda una carta en la manga: tirar de la vergüenza pública. Darse unas vueltas por el campo llamando la atención grupo por grupo, o bien acudiendo a la orquesta de turno para que les aperciba públicamente. No es viable en grandes aglomeraciones, pero en los campos pequeños no les va nada mal. Y sino que se lo digan a los chavales de Nantón, que han logrado llevar un ambiente más que pacífico a sus celebraciones.

Otra de las medidas que parece estar dando buenos resultados, en especial en lo que a consumo de alcohol entre menores se refiere, es la venta de bebidas por medio de tickets. Primero hay que pasar por una cabina y comprar un ticket para el tipo de bebida que se desee, y después en la barra lo canjean. Lo hacen, por ejemplo, en la Carballeira, en Malpica y en el Asalto.

El poder de las orquestas

Concellos y comisiones son colaboradores habituales en el buen devenir de las fiestas, en particular en lo que se refiere a los dispositivos de seguridad desplegados en los festejos, sobre todo en los que se prevén multitudes.

«Moitas veces a orquestra inflúe moito en cómo será a festa. Aínda que tamén é certo que o que teña ganas de pelexa teraa igual veña o Combo Dominicano que veñan Os Satélites», relata la edila Patricia Bello. «Hoxe en día hai moito desfase», considera, y apela a la responsabilidad y a la prevención desde los hogares.

Preocupa, además, el impacto sobre el paisaje que deja tras de si una verbena. La prohibición de los vasos de cristal, hoy día con prácticamente cero presencia en las fiestas, o la instalación cada vez más frecuente de baños públicos son algunas de las medidas que se han implantado en este sentido. Destaca, a este respecto, la campaña lanzada por el Concello de Zas para minimizar el volumen de residuos que se recogen a la mañana siguiente: vasos reutilizables con un coste de un euro que, una vez acabada la noche, pueden devolverse y se reembolsará el dinero. Se ha llevado a la práctica totalidad de verbenas del municipio.

Es el caso de las dos Carballeiras, en especial la de Zas, fuente en su día de altercados y desenfreno, que se han ido reduciendo paulatinamente hasta dar lugar a una celebración considerablemente más tranquila.

Vuelta al origen

Eso es precisamente lo que persigue la comisión del San Fins do Castro: habrá Berro Seco, habrá meriendas y habrá verbena. Pero nada de batalla de vino este año. «Queremos que todos os veciños estean a gusto na festa, que volva a ser unha gran romaría, como antes», explica Manuel Gil, uno de los organizadores.

Carballo dice «no» a los abusos en las fiestas

Interesante campaña la lanzada por la Concellaría de Igualdade e Benestar de Carballo coincidiendo con la celebración del San Xoán. «Se buscas emocións fortes goza da festa sen abusos, sen acosos e con cabeza» rezan los carteles que pretenden sensibilizar a los más jóvenes respecto a los acosos y agresiones sexuales, pero también en lo referido al consumo responsable.

Y es que, según una investigación realizada en la Universidad de Granada, en los botellones se dan «múltiples formas de violencia sexual» y, además, se ejerce una presión sexual excesiva -sobre todo de cara a las chicas- que tiene mucho que ver con la ingesta de alcohol.

Es por ello que desde la concejalía que dirige Maica Ures quieren extender esta campaña no solo a los festejos del verano, sino a todo el año, e invitan a las comisiones de las parroquias a que se sumen a la iniciativa. No deja de ser mera cartelería, pero todo esfuerzo es poco para llamar a la sensibilización de la población más joven.

JPARRI

«Sempre dixen que a presenza uniformada é fundamental, porque se traballa dende a prevención»

O Policía Local de Muxía, Manel Blanco, fala do operativo de seguridade despregado pola Barca de Muxía e das medidas tomadas para minimizar os desfases.

-Un xiro á Barca en condicións.

-Queriamos devolverlle ese carácter tradicional que tiña antes, pero ao mesmo tempo que seguisen convivindo todos os ambientes.

-¿De qué maneira o fan?

-Levando a cabo controis máis exhaustivos, tanto nos días previos como durante o transcurso da propia festa. É importante controlar esas zonas de botellón polo tema dos menores de idade, pero tamén porque adoitan moverse outras sustancias. Tamén se tomou a decisión de prolongar a festa do venres e do sábado ata as 6 ou 7 da mañá.

-¿Unha maneira de cansalos?

-Si, algo así, de rematar a festa ás 4 da mañá certa xente seguiría ao mellor polo pobo facendo ruído e, quen sabe, cometendo actos vandálicos. Deste xeito, unha vez acaba a festa van durmir e, como quen di, durante o día case nin se lles ve.

-A presenza da autoridade tamén terá o seu efecto.

-Eu sempre dixen que a presenza uniformada é fundamental, porque se traballa na prevención. Ao mesmo tempo, podemos actuar moito máis rápido en caso de que haxa altercados: unha pelexa 2 contra 2 pode frearse; cando xa son 20 contra 20, é practicamente imposible meter man.