El auditorio de Cabana se convirtió ayer en capital mundial de la ataxia

CARBALLO

Ana Garcia

PRIMERA JORNADA DEL CONGRESO | Salieron temas como las pruebas farmacológicas con animales, la relación con enfermedades afines o los tratamientos aplicados a otras dolencias cerebelares

30 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Si Japón acogió el primer simposio y Cabana el segundo, ¿Podría ser Florida el destino del tercero? Esta era una idea que, en conjunción con el doctor Koji Abe, lanzaba María Jesús Sobrido a los doctores de la clínica Mayo (Florida). Queda en el aire.

La primera jornada del simposio comenzó ayer en el auditorio cabanés a primera hora de la mañana con tres intervenciones relacionadas con la investigación clínica y epidemiológica.

A media mañana, el doctor Arias presidió la ceremonia de apertura, en la que participaron Juliana Moscoso, de la Asociación Galega de Ataxias, representantes de la Xerencia de Xestión Integrada de A Coruña y también de Santiago y la presidenta del comité científico, la doctora Sobrido. Estaba prevista también la intervención del alcalde, José Muíño, pero se excusó por un imprevisto.

Precisamente fue Arias el encargado de reanudar la ronda de ponencias. Presentado como «el padre de la ataxia da Costa da Morte» por Celia Pérez, del Chuac, el neurólogo explicó cómo fue el proceso de investigación en el que visitaron casa por casa a los familiares, mostrando asimismo vídeos de los diferentes exámenes médicos a los que sometían a los pacientes. «El perro de San Roque no tiene rabo», les hacía repetir a los afectados, para así testar el grado de atrofia lingual que presentaban, variable en muchos casos. Al finalizar su presentación, un miembro del público le cuestionó sobre el grado de atrofia muscular en las extremidades que presentaban los pacientes, respondiendo Arias que, a diferencia de la variante japonesa, los diagnosticados con ataxia da Costa da Morte no presentaban un particular cuadro de atrofia muscular.

Le siguió la doctora Carmen Serrano, de Manresa, hablando de la SCA37 y de las familias que fueron objeto de estudio -una inicialmente, a la que después se sumaron otras tres- presentando buena parte de los sujetos dificultades para realizar fluidamente movimientos oculares verticales. Mostró, asimismo, material audiovisual de las pruebas y explicó su viaje por toda la península en busca de más afectados. Narró incluso como, estando en Huelva, se le acercó una familia que decía presentar los mismos síntomas, aunque desechaban cualquier grado de consanguinidad con los pacientes afectados «En todo caso, podemos casi confirmar un ancestro común», puntualizaba.

También destacable fue la intervención de Leonard Petruccelli y Tiffany Todd (clínica Mayo, de Florida) que mostraron a los asistentes los resultados de sus pruebas con ratones. Muy frecuentes y extremadamente útiles son las pruebas con animales -sobre todo a la hora de testar fármacos- como el estudio con el pez cebra que desarrolla la doctora Sánchez-Piñón en la facultad de veterinaria de Lugo. Aunque estaba previsto que su ponencia cerrase la jornada de ayer, no pudo acudir.