El Chuac incorpora la biopsia líquida para detectar las células cancerígenas

R. Domínguez A CORUÑA / LA VOZ

CARBALLO

CESAR QUIAN

Anatomía Patológica se robotiza para automatizar y agilizar el procesado de muestras

30 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Complexo Hospitalario Universitario A Coruña ha comenzado a realizar la biopsia líquida, una prueba que, a través de una muestra de sangre, identifica células tumorales circulando por el torrente sanguíneo, y su ADN, antes de que el cáncer dé síntomas o incluso se refleje en las pruebas convencionales e imágenes de radiodiagnóstico. La técnica permite no solo una detección precoz, sino también realizar tratamientos individualizados, conocer su eficacia e incluso analizar los cambios moleculares que va sufriendo el tumor y si el cáncer se ha reactivado.

«Ya la hacemos en pacientes de nuestra área sanitaria y comenzaremos a recibir muestras de Lugo, Pontevedra y Ourense», indica Ángel Concha, jefe de anatomía patológica del Chuac.

El servicio, además, ha establecido acuerdos con diferentes firmas para el desarrollo de proyectos relacionados con esta técnica, como Oncomatrix o Sysmex, además de con los laboratorios Novartis y Amgen. «Se trata de desarrollar tecnología y establecer la metodología basándonos en ideas surgidas de nuestros profesionales», señala el especialista.

La incorporación de estas nuevas herramientas coincide con un momento en que el servicio avanza hacia la automatización de los procesos «no solo para agilizar resultados, sino para mejorar su trazabilidad, su seguridad, y, muy importante, para poder liberar a los profesionales de tareas laboriosas que ahora hacemos de una forma artesanal, que podrían dedicarse a realizar estudios por ejemplo de biología molecular», señala Concha. Esto, a su juicio, es importante dado «no solo el volumen que tenemos que analizar, que cada vez es mayor, sino a que cada vez tenemos que realizar estudios más complejos, como los moleculares para pautar fármacos».

En esta línea, la última incorporación ha sido un procesador y un microtomo automáticos, cuyo coste de arrendamiento ronda el millón de euros. El primero «procesa las muestras biológicas de manera más ecológica y a tiempo real», explica el experto antes de subrayar que «en España solo hay otro igual en el Clinic de Barcelona». El microtomo es, básicamente, una herramienta de corte con la que se seccionan láminas finísimas «para poder verlas al microscopio», añade. «Nos falta solo la pata de en medio, un robot que se encargará de llevar a cabo el proceso de preparación que ahora hacemos artesanalmente». Calcula Concha que este robot estará disponible a finales de este mismo año, y «no solo se pueden adelantar los tiempos de respuesta o resultados -subraya-, sino modificar el funcionamiento de todo el laboratorio para que trabaje en continuo asumiendo la complejidad, con mejores resultados en tiempo, en calidad, trazabilidad y en garantías de certeza para el paciente».

El laboratorio tiene un equipo citológico «único en España»

De la actividad creciente en cantidad y calidad que lleva a cabo el servicio de anatomía patológica del Chuac, del que depende confirmar diagnósticos tan cruciales como el cáncer o enfermedades autoinmunes, da idea el hecho de que toda cuanta muestra se extrae en el área sanitaria ha de pasar por sus microscopios. Son más de cien mil los estudios que realizan al año, y en el último ejercicio «han aumentado casi un 15 %». Entre ellos, algunos tan complejos como los inmunohistoquímicos y moleculares, que casi siempre tienen que ver con enfermedades graves.

El empuje a la automatización de todo cuanto proceso sea posible es, por ello, uno de los intereses de un servicio en el que «por supuesto, la tecnología no puede sustituir al profesional, que al final es el que interpreta los resultados», subraya el responsable de un equipo formado por alrededor de sesenta personas. En esta línea Ángel Concha enfatiza que «nos han traído un aparato que es el único que hay en España y uno de los primeros de Europa, para manipular automáticamente las muestras citológicas». Concha, que presume que el Chuac «ha llegado a tener picos con los mejores tiempos de repuesta en resultados de todo el país» confía ahora que a final de año la automatización se complete también en el área de histología y biopsias.