«Non lle deades as costas ao mar», decía el percebeiro que murió en Razo, Paco Souto

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

José Manuel Casal

Los compañeros localizaron al escritor y edil de Malpica boca abajo en un «rego»

31 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Non lle deades as costas ao mar», repetía una y otra vez Paco Souto a sus compañeros percebeiros. Era muy prudente, recuerdan, pero ayer encontró la muerte en Santa Mariña, cerca de la carballesa playa de Razo, cuando estaba faenando. El concejal del BNG de Malpica y activista cultural, además de mariscador, tenía 54 años, mujer y dos hijos.

Ayer estaban trabajando cinco personas en la misma zona, un conjunto de piedras cercadas que «aguanta moito do mar». Fue Mercedes, la única mujer del grupo, la que avisó a sus compañeros, y Oti y Carlos corrieron hacia ella sabiendo que algo malo había ocurrido. Cuando pasaron al otro lado de las rocas vieron a Jorge sosteniendo a Paco Souto, ya inánime, por un brazo. El percebeiro malpicán fue encontrado flotando boca abajo en lo que se conoce como un «rego», un lugar en el que el mar entra y sale. Entre todos lograron moverlo en dirección a tierra con grandes dificultades y comenzó la agónica tarea de reanimación.

Mientras los colegas auxiliaban a Paco Souto, Otilio Fernández Campos, de 36 años y dos de mariscador, salió corriendo hacia su coche para llamar a emergencias. Un médico le instruyó sobre la mejor manera de realizar el masaje cardíaco y el boca a boca. Para entonces, los percebeiros ya se habían dado cuenta de que poco podían hacer. Cada vez que presionaban el pecho del concejal nacionalista de Malpica oían cómo el agua se movía en el interior de sus pulmones.

Cuando el equipo de Protección Civil de Carballo llegó al lugar, fue Javier Souto el que tomó el relevo y continuó con las labores de reanimación. Los percebeiros se retiraron. «Subía la marea y hubiéramos sido muchos a rescatar», explicó Souto Facal, responsable de la agrupación, que tuvo que ser recogido por un helicóptero de Salvamento Marítimo junto con el cadáver. Ambos fueron trasladados al aeropuerto coruñés de Alvedro a la espera del forense y el juez.

Otilio Fernández y Carlos Fraga reconocieron ayer que desde el primer momento supieron que Paco Souto había fallecido. «Non sabiamos se levaba alí dous, cinco ou dez minutos, pero tiña un golpe moi forte na cabeza e outros moitos nos brazos, o mar fixo que se dera moito contra as rochas. Foi unha imaxe moi dura», explicó Otilio Fernández. Carlos Fraga asintió: «Non puidemos facer nada, estaba moi golpeado, debía levar un tempo na auga». Ambos recordaban la prudencia y la ayuda que les prestaba habitualmente Paco Souto: «Berraba sempre que viña unha onda. Coidaba de nós».

Además de Protección Civil de Carballo, acudieron la Guardia Civil (un helicóptero y una patrulla) y un tercer helicóptero, del 061, aunque los sanitarios no pudieron llegar hasta el percebeiro. Asimismo participaron los bomberos carballeses.