«Ya es hora de que la sanidad pública gallega cuente con cirugía robótica»

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

CARBALLO

MARCOS MÍGUEZ

El jefe de Urología del Chuac, que organiza un encuentro en Palexco, defiende el uso de la tecnología

26 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Coincidiendo con la celebración de la reunión nacional de los grupos de laparoscopia, robótica, litiasis y endourología, que cita a más de 300 expertos en Palexco hoy y mañana, el responsable del servicio de Urología del Chuac, organizador del encuentro, demandó ayer que Galicia se incorpore al cartel de comunidades que ofertan cirugía robótica a sus pacientes dentro del catálogo de prestaciones de la sanidad pública.

«Ya va siendo hora de que Galicia cuente con cirugía robótica», señaló Venancio Chantada en alusión a la importancia de que la comunidad se equipare a otras autonomías dado el impacto que tiene la tecnología en las intervenciones a los pacientes. Como urólogo, la especialidad en la que mayor aplicación tiene en la actualidad este equipamiento, señaló que la robótica arroja ya datos contrastados en cuanto a la reducción de secuelas quirúrgicas importantes para la calidad de vida.

De forma específica, Chantada se refiere a su utilización para operar el cáncer de próstata, toda vez que «cada vez diagnosticamos a hombres más jóvenes» y se ha demostrado «un cambio significativo en los pacientes que quedan con incontinencia e impotencia sexual».

En concreto, los datos que maneja el especialista indican que entre el 15-20 % de los enfermos intervenidos por cirugía convencional sufren incontinencia urinaria tras la operación, porcentaje que baja al 10 % cuando se practica por laparoscopia y desciende al 1 % con el robot. En el caso de la impotencia sexual, de alto impacto dada la edad media de la población afectada por el cáncer, se cifra que la sufren el 50 % de los varones intervenidos por cirugía abierta, el 30 % de los sometidos a laparoscopia y baja a un 10 % cuando se utiliza el robot, debido a la precisión que aporta la tecnología. «No podemos condenar a gente de menos de 60 años a perder su capacidad sexual», subraya Venancio Chantada.

Al margen de para intervenir el cáncer de próstata, el robot tendría aplicación también en intervenciones para extirpar tumores renales e incluso para el trasplante, y dado que «el de A Coruña es el servicio gallego que mayor número de operaciones por laparoscopia hace, hasta el 80 % del total, y el Chuac es centro de referencia para trasplante renal de donante vivo, tengo claro que el robot debería instalarse aquí». Apunta además que de esta tecnología podrían beneficiarse otros pacientes y servicios, ya que se utiliza también en cirugía general, cardíaca, torácica e incluso ginecológica, y sugiere la posibilidad de rentabilizar un aparataje cuyo coste ronda los dos millones de euros -con unos gasto de mantenimiento anuales de unos 100.000- estableciendo turnos de intervención «en horario de mañana y tarde».

«En el País Vasco hay siete robots en la sanidad pública, en Andalucía cuatro, ocho en Madrid... Galicia es la única comunidad de peso que todavía no dispone de él y los gallegos se merecen tenerlo ya», concluye.

El hospital interviene al año 150 cánceres de próstata y 70 renales

La experiencia en cirugía robótica, del que ya existen equipos en centros privados gallegos (en A Coruña cuentan con robot da Vinci el Hospital San Rafael y el HM Modelo) centrará parte de la reunión nacional del grupo de urólogos convocados en Palexco estos días en Palexco, donde se dará cuenta de los resultados obtenidos hasta el momento a nivel nacional. «Después del congreso nacional, esta es una de las citas más importantes para nosotros», subraya Chantada.

Pero al margen del robot, del que el experto apunta que podrían beneficiarse «al menos» la mitad de los 150 cánceres de próstata que se intervienen al año en el Chuac y otros 70 de tumores de riñón, el congreso se detendrá en revisar otros temas de interés para la especialidad, contando para ello con destacados especialistas. Entre ellos, Enrique Pérez-Castro, el cirujano que los 80 diseñó un aparato, el ureteroscopio, que revolucionó el tratamiento de los cálculos renales. «Hasta entonces o había que operar o bien se trataban en la bañera, por litotricia», explica el responsable de Urología del Chuac sobre una técnica que ahora permite a los cirujanos prácticas menos agresivas.

Además, entre los ponentes del encuentro en Palexco se encuentra también «un maestro de la Urología», en palabras de Chantada, el profesor Gil-Vernet Sedo, que ofrecerá una conferencia sobre anatomía quirúrgica de la práctica, y el simposio ofrecerá la posibilidad de asistir a un cara a cara sobre los diferentes tratamientos con láser en cirugía de la próstata, de la mano de los doctores Buisan y Ramírez.

El programa científico también reserva hueco para actualización de conocimientos en técnicas en extensión, como las embolizaciones prostáticas, en vez de la extirpación, para tratar obstrucciones.