Los Grupos de Desenvolvemento Rural (GDR) que eran dos en la Costa da Morte, ahora quedará solo uno, han jugado un papel inversor muy importante, sobre todo en los concellos más rurales, durante los últimos años.
¿En qué consisten?
Son organizaciones sin ánimo de lucro que se crearon en agosto del año 2008 para distribuir y sacar partido de los fondos europeos del programa Leader 2007-2013. Ahora se está poniendo en marcha otro plan, el del período 2014-2020, que implica reducción de recursos y, por tanto, obliga a fusionar grupos.
¿Qué impacto han tenido en la economía local?
Los casi siete millones de euros aportados por los GDR Costa da Morte y Bergantiños en el último período, dado que, como máximo, podían financiar hasta el 35 % de los proyectos productivos han supuesto una inversión total de 15,3 millones de euros, que incluso subirá cuando se contabilicen los fondos sobrantes repartidos recientemente. Este dinero ha servido para crear 74 puestos de trabajo y consolidar otros 212, siempre según las cifras ofrecidas por los propios grupos, cuyos gerentes consideran que la demanda de proyectos crecerá en el nuevo ciclo coincidiendo con una época de mayor dinamismo económico.
¿A qué se ha destinado el dinero recibido?
Los fondos llegados desde Europa han servido, sobre todo, para apoyar la iniciativa empresarial privada con proyectos que van desde modernización de granjas o equipamiento del sector forestal hasta instalaciones turísticas o negocios comerciales. Además, los propios grupos han desarrollado programas formativos y jornadas de tecnificación de lo más diversas.
¿Cuales serán sus nuevos objetivos ahora?
Tienen que cerrar la organización y ver qué fondos hay pero su máxima es el desarrollo rural.