Población y servicios en el medio rural

Luis García LA PIZARRA

CARBALLO

23 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una de las notas caracterí­sticas de la ocupación del territorio de Galicia en general y de la Costa da Morte en particular es la dispersión demográfica en numerosos núcleos de población; como tónica general hay un núcleo de población por cada kilómetro cuadrado. Un panorama difícil y complejo para la ordenación del territorio y la prestación de servicios de manera eficiente.

Las disposiciones legislativas de los últimos años han contribuido a poner concierto en la ordenación territorial y a planificar el futuro, a través de los PXOM y normas subsidiarias. Sin embargo, restricciones lógicas a la edificación en áreas rurales, han inducido a la emigración a los centros cabecera de comarca o a las capitales municipales, con la pérdida de población de numerosos núcleos, que se han visto inmersos en el denominado cí­rculo vicioso del despoblamiento rural, que viene a ser una concatenación de causas - efectos de consecuencias negativas para la cohesión de los territorios rurales.

Básicamente el cí­rculo vicioso se inicia con la ausencia de oportunidades y de empleo que empuja a la emigración, fundamentalmente de los jóvenes, con la consecuencia inmediata del envejecimiento demográfico. Con la persistencia de la pérdida de habitantes se sobrepasan los umbrales de población para la prestación racional de los servicios. Y al no haber servicios suficientes se reducen los factores de atracción del territorio, con lo que se acelera la corriente emigratoria. De no tomarse decisiones estratégicas que contribuyan a romper el cí­rculo vicioso, el futuro de no pocos núcleos rurales estará abocado a la extinción o a la marginación.

El asentamiento de población en las zonas rurales es importante para la sostenibilidad económica, social y ambiental. Es evidente que la prestación de determinados servicios tendrá el coste añadido de la dispersión, pero el que los pueblos tengan vida es un bien para la sociedad en general.

Otras regiones

Como en tantas cosas, habrá que ver qué iniciativas funcionan en otras regiones para ver si será viable aplicarlas. En el caso del transporte de viajeros, en Castilla-León funciona, desde 2006, el denominado transporte a la demanda, que facilita el traslado de la población de los pueblos al centro cabecera de comarca. Se trata de una oferta que pretende optimizar los servicios y las rutas. Otra posibilidad es aprovechar también las líneas de transporte escolar. Se trata de establecer medidas para romper el círculo del despoblamiento rural.