La Costa da Morte se contagia del espíritu festivo

Á. palmou CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

<span lang= es-es >De ruta por Dumbría</span>. La amenaza de mal tiempo no disuadió a los caminantes que se sumaron a la última salida -ya aplazada con anterioridad por el viento- del ciclo Andainas Coñece a Costa da Morte.
De ruta por Dumbría. La amenaza de mal tiempo no disuadió a los caminantes que se sumaron a la última salida -ya aplazada con anterioridad por el viento- del ciclo Andainas Coñece a Costa da Morte. R. QUINTÁNS< / span>

La comarca se recupera de una resaca de celebraciones varias

16 jun 2015 . Actualizado a las 13:46 h.

La Costa da Morte se recuperaba ayer de la resaca de un fin de semana en el que la fiesta ha sido total. Hasta los salones de plenos de muchos municipios fueron escenario de unas escenas de júbilo -aunque no compartidas por todos los presentes- que se dejaron sentir también en pabellones, carballeiras, restaurantes, calles y hasta carreteras.

José Manuel Casal
 Algunas celebraciones arrancaron ya el viernes por la noche, como la concurrida inauguración de la exposición colectiva de artistas carballeses, o el homenaje que la Gran Orden Gastronómica Costa da Morte tributó al catedrático Miguel Pocovi Mieras, concediéndole su diploma honorífico, que recogió de manos de José Antonio Martínez Romero, Tonecho. También hubo diplomas para los alumnos de los últimos centros escolares en celebrar sus graduaciones -Artai y Fonteboa- y para los ganadores del certamen de pintura ao aire libre de Cabo Vilán, cuyo tercer premio, en contra de lo anunciado inicialmente por los organizadores -ya se sabe lo que pasa a veces con las prisas- fue para Paco Casal .

Las fiestas, aunque fuesen interruptus -caso del San Antonio de Xallas, cuya verbena del sábado hubo de ser pospuesta hasta ayer por el mal tiempo- llenaron de música las noches de una decena de lugares. Pero es probable que ninguna de las orquestas que las amenizaron lograse tal comunión con el público como los grupos que pasaron por la Foliada de Borneiro, donde el brillo de la pasión por la música tradicional se dejó ver por igual en los ojos de jóvenes y mayores.

ANA GARCÍA
 La emoción fue el ingrediente central de otras convocatorias. Así vivió Rosa Barreiro, la directora del CRA Nosa Señora do Faro, de Ponteceso, el homenaje con el que la sorprendieron -ella pensaba que acudía a la tradicional cena de fin de curso-, compañeros, excolegas, exalumos, familiares y amigos por sus 25 años de docencia en la unitaria de Brantuas. Una proyección de fotografías de toda su vida y el poema que le dedicó Xosé María Varela no hicieron sino aumentar la carga emotiva de una velada que arrancó con un alumno tocando la gaita y concluyó, horas después, bailando al son de una discoteca móvil.

R. QUINTÁNS
 Fotografías -las de los 20 años del Asalto a través de La Voz-, música -la del cedé Irmandiño Son- y fiesta sobre ruedas -con el Día da Bicicleta- hicieron avanzar el fin de semana en Vimianzo -en Dumbría, ese papel lo cumplió la última caminata del ciclo Andando Coñece a Costa da Morte-, donde el colofón fue teatral y a cargo del grupo Teté de Salto, que llenó de risas y aplausos el auditorio de la localidad con O parto de Calandrino
Ana Garcia

También sonaron las palmas en Baio y en Cabana. Sendas demostraciones a cargo de los pequeños de las escuelas municipales volvieron a confirmar que el talento para el deporte, la música y el baile no es cuestión de edad. 

Ana Garcia