La portavoz del PP en Corcubión, Gema Freire, salió ayer al paso de las duras declaraciones del alcalde, Francisco Javier Lema, contra las políticas de los populares a nivel local y contra ella particularmente. En primer lugar, Freire quiso dejar claro que ella no se mueve por dinero. «Tengo una familia maravillosa que me quiere, una casa, un trabajo, algunos ahorros y me conformo con eso. No necesito grandes joyas ni otras cosas. Además, no entiendo como se puede decir eso cuando cobro del Concello seis euros brutos por pleno. Creo que el año pasado llegué en total a 108 o 120, una cosa así. Con lo cuál, los que deben tener intereses económicos son los que adjudican los contratos de mantenimiento siempre a las mismas empresas», señala la concejala.
Freire niega que actúe por resentimiento, como aseguró Lema. «Yo no soy resentida, el que se mueve por rencillas personales es él porque las ha mamado. De hecho llegó al Concello con el único objetivo de meter en la cárcel al anterior alcalde, Rafael Mouzo, por un asunto de venganza familiar que sabe todo el mundo en el pueblo. Rebuscó en los cajones a ver si encontraba algo y le salió mal» señala.
Respecto a los asuntos judiciales, recalcó que no fue ella quien le imputó los delitos de la operación Orquesta, ni tampoco el PP. «En tal caso, como dice Ramón Vigo, sería su compañero de partido Francisco Caamaño», añade la edila, quien reitera que lo único que hizo fue poner en conocimiento de la Fiscalía unos hechos porque ella no tiene el mandato de controlar al gobierno en Fisterra o Mazaricos sino en Corcubión.
Freire dice que le molestó especialmente que le llamase maleducada, que si Lema no llegó al Parlamento gallego «será porque no lo valoran en su partido» y que ella puede ir por el pueblo con la cabeza alta ya que llegó y se irá de la política con las «manos limpias».
«Yo no soy resentida el que se mueve por rencillas personales es él porque las ha mamado»
Gema Freire