Ganaderos, docentes y estudiantes galos y gallegos ponen en común experiencias

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

J. M. CASAL

Los grupos de Meslay y Fonteboa siguen un programa que pretende mostrar alternativas a la producción láctea

05 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Desde que llegó a Coristanco la expedición de alumnos y profesores del centro Meslay y de profesionales de La Vendée (Francia), el grupo, formado por 28 personas, ha tenido la oportunidad de conocer la realidad del mundo rural de la zona. Se han realizado numerosas visitas en las que los organizadores, del centro Fonteboa, ha elegido explotaciones y actividades alternativas a la producción láctea.

Hoy está previsto iniciar el camino de regreso, pero los franceses que han estado en la zona han podido apreciar las diferencias y similitudes de las dos zonas de producción y han sido capaces, asimismo, de poner en común sus distintas experiencias.

Cristhian Bretin es el director del centro Meslay desde hace cinco años y aunque la institución mantiene un intercambio con Fonteboa desde hace un cuarto de siglo nunca había tenido la oportunidad de estar en la Costa da Morte.

Formación

Con respecto a la formación de los agricultores señala que en Francia tienen una enorme importancia y destaca especialmente que en los últimos años se ha puesto en marcha una corriente en la que se da cada vez más relevancia a la formación continua de los propios profesionales. Estas prácticas se han desarrollado, fundamentalmente, en los últimos cinco años y explicó que hay muchos programas en este sentido, ya que cada vez hay más exigencias en cuanto a los conocimientos que deben tener los agricultores.

Entre los profesionales que han viajado a la zona está Denis Billaud. Tenía una granja de leche y eligió no realizar más inversiones. Tuvo que redirigir su negocio, que ha quedado notablemente diversificado. Ahora tiene 35 vacas de carne de la raza Limusin, además de gallinas ponedoras para la cría de pollos en una nave de 1.300 metros cuadrados. También planta patatas de siempre en 17 hectáreas y trigo para la siembra. Su experiencia ha tenido un doble sentido, porque le acompañó su mujer, Genevieve, que regenta tres albergues en antiguas casas de campo rehabilitadas. Puede dar alojamiento a 20 personas. Su negocio y forma de vida es un ejemplo de reorientación vital y de análisis de las posibilidades del medio rural.

Alumnos

Por lo que respecta a los alumnos, uno de ellos es Baptiste Sorin, de 23 años, que realiza el segundo curso de formación superior agraria. Anteriormente estudió para técnico en energías renovables, pero abandonó la actividad cuando se quedó sin salidas laborales. Entonces decidió reconvertirse en agricultor en la explotación de su padre, a la que se incorporará en cuanto termine su formación.

La granja en la que vive se dedica a la producción de leche, la misma actividad que realiza la familia del estudiante de Fonteboa Fabián Gómez, que acogió al grupo en la SAT Os Corraliños de Muxía. Baptiste Sorin reconoció que no había tantas diferencias entre la forma de trabajar que había en su casa y lo que vio en la explotación de la parroquia de Ozón.

El programa de trabajo que se puso en marcha durante estos días de estancia en la Costa da Morte también incluyó varias visitas culturales y recreativas, como la realizada el miércoles a Caión. Para hoy está prevista la última visita formativa. Así, a las 10.00 horas llegarán a Coriós, donde serán guiados por David López en Agrodayca S.C. Él les hablará de la producción hortícola y de la venta a grandes áreas comerciales. Después, la delegación francesa iniciará su retorno.