Si finalmente no se ejecutan todos o algunos de los parques eólicos, los concellos perderán mucho dinero con el que contaban. Tanto, que la mayoría modificaron al alza el ICIO (entre el 4 y el 4,5 %) para aplicar al presupuesto global. A mayores, el IAE anual y los convenios particulares. Los 16 parques suman 533 millones, al menos sobre el papel.
-¿Es seguro que no se van a construir los parques?
-No. No hay nada en firme, pero es lo que teme la patronal. Con la bajada de ingresos de los parques viejos, que quedan a expensas del precio del mercado, no hay dinero. Y los bancos no financian sin expectativas. Es probable que alguno sí salga adelante, pero no todos.
-¿Qué puede pasar con los que están en funcionamiento?
-Alguno puede caer en manos de los bancos, como las hipotecas impagadas. No porque no hayan sido rentables hasta ahora (la Costa da Morte es pionera en España en la implantación de energía eólica), sino porque muchos se construyeton con préstamos a largo plazo, ligados a los beneficios que ahora no llegarán.
-¿Qué pide la patronal?
-La gallega, muchas cosas. Entre otras, que Feijoo los defienda para que no se ejecuten los cambios y se penalice al sector de manera «injusta».