La Vendée es ejemplo para la incorporación de jóvenes en granjas

Luis garcía

CARBALLO

El grupo visitó una pequeña explotación ecológica de cerdos, con fábrica propia.
El grupo visitó una pequeña explotación ecológica de cerdos, con fábrica propia.

El grupo de Fonteboa estudia el modelo para aplicarlo en Bergantiños

12 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Después del prólogo en tierras aragonesas, la expedición de Fonteboa llegó al Pays de La Loire (Francia) e inició el programa de trabajo preparado por los responsables del Institut de Formation Superieur de Meslay. Después de una presentación de la región para poder contextualizar todas las observaciones de la semana, el tema inicial fue la incorporación de un joven a una explotación agraria en régimen de sociedad.

Adrien Baranger, de 25 años, explicó al grupo de Fonteboa el proceso de su incorporación a la actividad agraria en una sociedad (GAEC) con su madre y su hermano, al producirse la jubilación de su padre. Se trata de una explotación con 1.300 ovejas para carne sobre una superficie de 126 hectáreas y con el objetivo de consolidar tres puestos de trabajo.

La Vendée, uno de los cinco departamentos del Pays de La Loire, tiene a día de hoy una tasa de paro en torno al 9 % de la población activa (la media de Francia se sitúa alrededor del 13,5 %). Los porcentajes de activos agrarios a nivel departamental y nacional van parejos, un, 4 %. Hay preocupación en el sector por la pérdida de trabajadores y por ello se adoptan medidas para incentivar a los jóvenes, similares a las de España.

Sin embargo, los jóvenes decididos a ser agricultores se enfrentan a dos obstáculos: se trata de una profesión que exige dedicación de muchas horas de trabajo y es necesario acometer inversiones de gran calado para obtener el capital (en Francia todo se vende, poco o nada se hereda). Hace falta tener las ideas muy claras y aplicarse a fondo, como ha hecho Adrien Baranger, un joven sobradamente preparado (formación equivalente a Gestión de Empresas Agropecuarias y con 6 años de experiencia profesional) que a partir de septiembre formalizará su incorporación a sociedad agraria familiar.

En su anterior empleo percibía un buen salario, alrededor de 2.000 euros al mes, pero como, según explica al grupo, su proyecto profesional era dedicarse a la agricultura porque le gustan los animales y la naturaleza y porque aspira a gestionar su propia empresa.

Cualificación

A pesar de que Adrien Baranger ya disponía de cualificación profesional suficiente, durante el último año ha decidido realizar un período de formación para apuntalar bien su proyecto. Se ha inscrito en el centro de Meslay para seguir la formación del Certificado de Capacitación Técnica Agrícola y Rural, siguiendo la metodología del sistema de alternancia (períodos en el centro y períodos de trabajo profesional).

El caso de este joven vendeano, según opinión de los profesionales que acompañan a los alumnos de Fonteboa, es un buen ejemplo para jóvenes con deseo de incorporarse a una explotación agraria con una visión empresarial de la actividad. Es una manera de rejuvenecer los activos agrarios de una profesión, la de agricultor, que es estratégica en el medio rural.