Cabo Vilán y el interés nacional

S. G.

CARBALLO

S. Garrido, periodista; Olga Campos, presidenta de los empresarios; Manuel V. Alonso, alcalde; y Sabela Rodríguez, técnico de Turismo.
S. Garrido, periodista; Olga Campos, presidenta de los empresarios; Manuel V. Alonso, alcalde; y Sabela Rodríguez, técnico de Turismo. e. g.< / span>

Tres expertos relataron el arte, la cultura y la historia del enclave

14 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El Cabo Vilán acaba de cumplir 80 años desde que fuera declarado Sitio Natural de Interés Nacional, uno de los pocos lugares con esta distinción, que lo empareja con la Ciudad Encantada de Cuenca o las Lagunas de Ruidera. Tal efeméride no ha pasado desapercibida para la asociación de empresarios local, que acaba de poner en marcha un amplio programa de actividades para los próximos meses.

El primero fue ayer, con tres expertos que analizaron la importancia del lugar desde diversas perspectivas. Eliseo Fernández Fernández, historiador, bibliotecario y licenciado en documentación aportó numerosos datos históricos que ayudaron a contextualizar la declaración natural.

Curiosamente, Fernández es nieto de un torrero que en 1933, el año de la declaración, trabajaba en el mismo faro. Una de las distracciones era jugar al ajedrez con otras torres mediante señales telegráficas.

Antón Castro, profesor de Arte en la Universidade de Vigo, se apoyó mucho en su localidad, Muxía, para explicar la importancia del culto a las piedras o la cristianización a través de los siglos o, en general, la comprensión de Galicia. Y lo hizo con un discurso enhebrado con infinidad de referencias didácticas, que comenzó con la «referencia especular da conciencia mítica que temos os do outro lado»: Vilán siempre ha estado presente para los de Muxía, en la otra parte de la ría.

Otro muxián, Manuel Vilar, coautor de un libro (entre otros muchos) sobre los faros de la Costa da Morte, exhibió mapas que ayudaron a tomar perspectiva histórica sobre Vilán y Fisterra a lo largo de los siglos. Y analizó cómo se puede aprovechar el patrimonio sin caer en despropósitos, comparando con los que se hace en faros de Estados Unidos, Inglaterra o Irlanda, por ejemplo: «O enfoque turístico, si pero sen esquecer outros». Pidió «mirar polo noso», por los pequeños detalles, por las historias de la gente que dio vida e historias a los lugares que se quieren potenciar.