Representantes de la cultura de la comarca critican con dureza la sentencia

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CARBALLO

16 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La sentencia del Prestige ha generado un torrente de comentarios a través de las redes sociales que resulta imposible de abarcar y en el que numerosas personas conocidas del mundo de la literatura, la música o el teatro de la Costa da Morte han expresado su opinión para criticar con dureza el fallo.

«Non esquecemos, non á impunidade. Mareas negras Nunca Máis», asegura el ceense Miro Villar en su llamamiento a participar en las concentraciones programadas que aprovecha para destacar que «no banco dos acusados non estaban quen tiña que estar».

El líder de Luar na Lubre, Bieito Romero, echa mano de expresiones populares para pronunciarse en el mismo sentido. «¿Xuízo do Prestige? Bueno carallo bueno... Tíralle un galgo», dejó escrito en Twitter.

El músico de Quenpallou y profesor en la zona, Guillerme Ignacio Costa, compartió una imagen alusiva a la catástrofe con el lema «once anos despois, temos que volver chorar. Isto xa non ten nome»; mientras que el actor Santi Romay se queja de que no haya responsables. «Resulta que non existen culpables na catástrofe do Prestige... Indignante e vergonzoso. Pero recordarémolo toda a vida. Nunca Máis», afirma.

Chapapote

Otros creadores con vínculos nacionalistas como el cormelán Suso Lista afirma con rotundidad: «Non esquecemos», al tiempo que muestra una imagen suya recogiendo petróleo y se pregunta: «¿Alguén sabe algo de que se fixo co chapapote que se depositou en terra?».

«Todos absoltos, sí señor. Aí está a Xustiza en España», se lamenta el escritor y exedil fisterrán Modesto Fraga, que ahora trabaja como librero en Arteixo.

También en el plano político, el ceense Fran Caamaño, exministro socialista, se hace una pregunta directamente relacionada con la que es su especialidad y la competencia que desempeñó en el Gobierno: «Caso Prestige. La Justicia... ¿Emana del pueblo?».

Empresarios, profesores, marineros y vecinos se suman también a las críticas. Por ejemplo, el director del centro comercial Finisterrae, Demetrio Casais, expresa su opinión con una foto sobre la que se lee un rótulo: «Nunca máis piratas».