Belén do Campo inspeccionó la mejora de la vía que une Agualada y Buño
27 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La delegada territorial Belén do Campo visitó ayer las obras de mejora de la carretera que une Agualada con Buño acompañada por los alcaldes de Coristanco, Ponteceso y Malpica, municipios a los que benefician los trabajos que se realizan en la vía y que están a punto de terminar. Do Campo aprovechó la ocasión para hablar sobre la travesía coristanquesa con Antonio Pensado, después del pleno en el que el regidor a punto estuvo de pactar una moción con el BNG sobre la señalización horizontal de la C-552 a su paso por la capital municipal.
Según aseguraron tanto la representante de la Xunta como el regidor, ya no hay problemas y se ha llegado a un acuerdo. Al parecer, la Consellería de Medio Ambiente ha aceptado las modificaciones solicitadas por los vecinos. Pensado Plágaro señaló que solo se ha detectado un problema en la carretera de Santa Comba y que se subsanará.
Belén do Campo reconoció que las quejas relacionadas con las travesías son habituales «porque todo el mundo quiere tener acceso a su garaje y girar donde considere más conveniente, pero lo que siempre tiene que primar es la seguridad».
Con respecto a la vía de Agualada a Buño destacó que los trabajos se han centrado en la mejora de la calzada, que tiene una superficie de 43.000 metros cuadrados. Las obras se han realizado en los 14 kilómetros de la carretera y han costado 225.359 euros. Actualmente están terminando las labores de señalización. La vía conecta con la futura autovía de la Costa da Morte. Belén do Campo recordó que es la empresa la que tiene problemas para continuar los trabajos y confió en que tengan solución.