El colegio de Os Muíños, de Muxía, fue escenario ayer por la mañana de un emotivo encuentro con Xosé Neira Vilas. Sentado junto a una mesa camilla y rodeado por los 135 estudiantes del centro, el autor de Memorias dun neno labrego repasó su vida y su obra y atendió con gran simpatía la interminable batería de preguntas planteadas por sus pequeños interlocutores.
Sus recuerdos de infancia, la inspiración de su obra más famosa, la veracidad de algunos de los episodios que relata en ella y su periplo vital en la emigración, tanto en Argentina como en Cuba, fueron algunos de los temas que suscitaron el interés de los alumnos y que el autor no dudó en aclarar hasta que, ya al mediodía y con la comida esperando por los escolares, hubo que dar por finalizada la charla.
La secretaria de la biblioteca, Susana Seoane Dovigo, se mostró muy satisfecha por el desarrollo de la visita y destacó que el acto estuvo lleno de «ternura» y que Neira Vilas dejó patente «o gran corazón que ten».
Al término de la charla, aún tuvo tiempo para firmarle ejemplares de Memorias a muchos de los niños presentes.