Las buenas iniciativas gastronómicas tienen premio

C. Abelleira / Harry Dorial

CARBALLO

Uno de los alumnos-vendedores de Fonteboa, obsequiando con orellas a los clientes.
Uno de los alumnos-vendedores de Fonteboa, obsequiando con orellas a los clientes. CASAL< / span>

08 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

gentes del finisterre

E n el puesto de Fonteboa, que ya es habitual en el mercado y las ferias de Carballo, ayer no solo había productos de la huerta. Los alumnos, asesorados por la cocinera de la escuela agraria de Coristanco, se pasaron la tarde del miércoles preparando orellas, que ayer regalaron a sus clientes con cada compra.

Al mediodía la cesta ya estaba vacía, y los cocineros primerizos recibieron muchas felicitaciones por su destreza preparando uno de los dulces más típicos del entroido. Lo que se vende en el puesto, perfectamente colocado y atendido por los jóvenes estudiantes de formación profesional agraria, tiene cada vez más demanda entre los amantes de la dieta sana.

Ayer volvieron a arrasar los grelos y la lechuga, pero también vendían más repollo que en días anteriores. Y es que el tiempo es el propicio para el cocido, sea de grelos o sea de repollo. En cualquier caso, y para los novatos en los fogones, los jóvenes también repartieron una receta en la que explican paso a paso cómo se prepara.

Con el paso de las semanas, su presencia ya empieza a formar parte del paisaje ferial carballés, dando ese toque de calidad en el vestuario que, quién sabe, igual se le pega a otros puestos, como ocurre en algunos mercados (cierto: la mayoría son interiores) que se ven en determinadas localidades europeas, todos cortados por el mismo patrón. Cierto que en quienes acuden a vender los huevos es poco probable, pero debería cundir en los que son profesionales del asunto. Es una simple idea, no más. En todo caso, buen trabajo el de los alumnos del centro de capacitación que dirige Luis García. Incluido el apoyo que brinda a los productos de la zona, como esos grelos de Anxeriz.

Hablando de mandilones y de calidad gastronómica, no podemos olvidarnos de que hace prácticamente una semana que Clarisa Fernández, de Casa Sánchez de Erbecedo, recibió en Lalín uno de los Premios de Gastronomía de Galicia. Leyendo las crónicas de los compañeros de La Voz en la comarca de Deza, el acto estuvo a la altura de las buenas comidas que se preparan en este veterano restaurante, incluido la tele en directo. Por cierto, por allí andaba el alcalde coristanqués, Antonio Pensado Plágaro.