Formas solidarias de emplear el tiempo de vacaciones

CARBALLO

La oenegé Equus Zebra instaló dos contenedores de ropa usada en Muxía.
La oenegé Equus Zebra instaló dos contenedores de ropa usada en Muxía. xesús búa< / span>

15 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

A ninguno de los dos les gusta llamar «vacaciones solidarias» a su experiencia porque, explican, no cruzaron el planeta para hacer turismo, sino para echar una mano a aquellos que lo necesitaban. Sin embargo, y aunque la definición tenga un deje lúdico, lo cierto es que ambos dedicaron su tiempo libre a los demás, así que quizás así sea más fácil entender lo de «vacaciones solidarias». Cristina Santos Díaz, de Ponteceso, y Matías Souto Álvarez, de Carballo, acaban de volver de unos viajes que jamás olvidarán. Ella, licenciada en Trabajo Social y Sociología y máster en Género, estuvo durante un mes en Cabo Verde, desarrollando un proyecto del Fondo Galego de Cooperación. «Estiven desenvolvendo un programa de igualdade para mulleres», contó en Voces de Bergantiños, de Radio Voz. Matías, por su parte, viajó a Ecuador con Enfermeras para el mundo (deberían añadirle también el de enfermeros, porque, y Matías solo es un ejemplo, lo es), una oenegé con la que se dedicó a viajar por todo el país para impartir charlas de salud sexual y prevención del sida a niños y jóvenes de entre 9 y 17 años.

Jóvenes y preparados, Matías y Cristina lo tuvieron claro a la hora de dar el paso de coger un avión y viajar varios cientos de kilómetros para ayudar a los demás. «Sempre quixen facer algo así e sempre tiven curiosidade por saber como traballaban as entidades noutros países», explicó ella. «Eu teño unha prima que estivo tres anos coa Cruz Vermella Internacional e foi ela a que me metou a idea na cabeza», contó él. En lo que coinciden ambos es que la experiencia superó todas sus expectativas. «Antes de partir xa me advertiron na asociación coa que fun que non levase nada planificado, que todo nos ía sorprender», contó Matías, quien vivió una divertida experiencia en Ecuador: «Ía pola rúa, todo orgulloso coa miña camiseta do Deportivo cando unha española paroume e preguntoume de onde era. Primeiro lle dixen que de Galicia, despois de A Coruña, despois fun acoutando e díxenlle que era da Costa da Morte..., e a súa cara era cada vez máis sorrinte. Cando eu xa lle preguntei se coñecía Carballo empezou a ri e ¡díxome que o seu pai era de Sísamo! Eu non o podía crer. Foi incrible».

Ambos aseguraron que tanto en Cabo Verde como en Ecuador se sintieron muy bien acogidos, y que a pesar de la distancia y de las diferencias culturales, sintieron que entre Galicia y los países en los que estuvieron incluso había algunas similitudes. «Recíbente e arróupante como se foses da familia. Fan o imposible porque esteas ben. E no meu caso a señora que me facía a comida incluso me rifaba porque dicía que non comía nada e recordábame moito a miña avoa», recordó Cristina. «Eu sentín o mesmo nas comunidades máis afastasdas, onde ías a unha casa e os veciños sacaban todo o que tiñan para que comeses. Iso recordoume moito a Galicia», añadió Matías.

Para ambos, insisten, sus vacaciones solidarias han sido una experiencia única que confían en poder repetir algún día. «Tal e como está a situación alí vin con moitas gañas de volver, aínda que hai moitos lugares, tamén aquí, nos que axudar», explicó Cristina, quien aseguró que podría adaptarse perfectamente a vivir en Cabo Verde. «Botei de menos aos meus e tamén a independencia de ter un coche e moverte onde queiras, pero adapteime rápido ao ritmo de vida de alí», dijo Cristina.

«Eu seguramente acabe volvendo a algún lado, porque vivín unha experiencia única que me axuda agora a apreciar moitas cousas das que antes non me decataba», añadió Matías.

Recogida de ropa

Ambos jóvenes, destacaron que no hace falta irse lejos para echar una mano a los que más lo necesitan, que a la vuelta de la esquina podemos encontrar una oenegé a la que ayudar. En Muxía, por ejemplo, donde el martes fueron instalados dos contenedores de la entidad Equus Zebra. «Neles pódese depositar roupa, calzado, mantas e roupa de cama, toallas... Todo aquilo que nós xa non queremos pode servir para axudar a grupos necesitados», explicó Mariam Sambad, responsable del área de Medio Ambiente del Concello de Muxía, que, junto con el alcalde de la localidad, Félix Porto, recibió al presidente de Equus Zebra, Víctor Omgbá. El responsable de la entidad explicó que tienen previsto instalar más contenedores en la zona, concretamente en Vimianzo y Ponteceso.