Los secretos del dolmen de Dombate ya están al alcance de los visitantes

Ángel Palmou CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ayer se abrió al público la réplica del interior del yacimiento

06 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Un cuarto de siglo después de las primeras excavaciones en el dolmen de Dombate, el proceso para recuperar y poner en valor un yacimiento calificado por los especialistas como la catedral del megalitismo está a punto de tocar a su fin.

A la flamante cubierta inaugurada el año pasado para proteger el monumento situado en Cabana y permitir que los visitantes conociesen su aspecto exterior se les sumó ayer una construcción -nueva eso sí- que posibilitará que algunos de los secretos del dolmen, hasta ahora solo al alcance de los especialistas, puedan ser conocidos por el público en general.

Pese al mal tiempo reinante ayer, o precisamente gracias a él, los primeros visitantes aprovecharon la jornada de apertura de la réplica de la cámara y del corredor interior de Dombate para internarse en este misterioso espacio y contemplar la minuciosa recreación de las pinturas rupestres con los que los constructores del dolmen lo habían decorado.

El acceso a la ornamentación original está vedado al público para evitar su deterioro y garantizar las condiciones ambientales y los cuidados que requiere su conservación, pero esta neocámara refleja de manera fiel la construcción auténtica inspirándose en las soluciones museísticas ya aplicadas en otros conocidos yacimientos arqueológicos.

Esta réplica, situada en el centro de visitantes que da la bienvenida al complejo de Dombate, es una reproducción exacta y a tamaño natural del interior del dolmen y su construcción ha supuesto una inversión de 83.000 euros por parte de la Diputación de A Coruña.

«Es una maravilla. Muy bonito. Parece de verdad», explicaba ayer tras internarse en el corredor Mari Mar García, una turista madrileña que visita periódicamente la comarca puesto que está casada con un pontecesán, pero que no se acercaba hasta Dombate desde hacía años. «Estuve aquí cuando estaban aún con las excavaciones, pero esto ya no tiene nada que ver, está muchísimo mejor», señaló también gratamente sorprendida por el aspecto de la cubierta que da cobijo al dolmen, por la protección que le presta y por el hecho de haberse encontrado con otras personas en este monumento cada vez más frecuentado.

«Con esta réplica, el centro de recepción consigue mantener en perfectas condiciones el estado del dolmen, mientras permite a los miles de visitantes que recibe cada año imaginarse cómo es el interior del megalito», señalaron por su parte fuentes de la Diputación Provincial de A Coruña.