Las celebraciones del fin de semana en la Costa da Morte se contaron por llenos. «Houbo xente para todo», resumían ayer los organizadores de algunas de las fiestas, que achacan la masiva afluencia de público, sobre todo, al buen tiempo. Tal vez por eso incluso fueron más multitudinarios los actos nocturnos que los diurnos, pues en las horas centrales del día el que más y el que menos aprovechó para desplazarse hasta las playas en busca de sol o por buscar la sombra en las numerosas áreas recreativas que hay tierra adentro.
«Hace muchos años que no recuerdo tanta gente en Malpica», aseguraba ayer el concejal de Turismo, Alfredo Cañizo, tras las exitosas Festas do Mar. «Salió todo de maravilla, y creo que la gente está muy contenta», destacó. El concierto de Lucía Pérez, el sábado por la noche; la procesión marítima y la verbena del domingo estuvieron especialmente concurridos. Este año, el último baile se celebró de 21.30 a 24.00 horas, para que la sesión de fuegos artificiales que iluminó la playa de Area Maior da Vila fuese, realmente, el broche de las celebraciones.
Multitudinarias fueron también algunas fiestas gastronómicas como la del Pichorro, que se celebró el sábado por la noche en Cances (Carballo), o la degustación de bonito y pez espada del domingo por la tarde en la feria del mar de Muxía.