Toba y A Piña se hermanan en honor de sus patronos

e. eiroa, Á. palmou CEE, CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

La poxa dos galos congregó a muchos vecinos tanto en Cee como en Carballo

17 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Es un hecho sintomático que ayer, fiestas patronales de la parroquia ceense de Toba, fuera festivo en el municipio. Y es que la fiesta de San Adrián de Toba es una de las más queridas por los vecinos.

Hubo misa, sesión vermú, verbena y, como en A Piña, «poxa dos galos». Salvo por ese último aspecto, podría pasar por una fiesta más. Pero la de Toba tiene algo especial. A media mañana los coches no cabían en los accesos y las hileras de vehículos aparcados eran kilométricas. La misa de campaña, cantada por la Coral Neria, fue seguida por cientos de vecinos devotos de su patrón, al que acompañaron a hombros en la breve y hermosa procesión culminada con una espectacular traca de bombas de palenque.

Además de Panorama y Oca, tocó ayer el grupo local Peta Forte. Eran cerca de las dos de la tarde cuando, tras regresar el santo a la iglesia, empezó la subasta de gallos. Se hizo a la puerta de la rectoral, que aunque está medio en ruinas, recibió en los últimos meses una limpieza y un mínimo adecentamiento.

La cosa arrancó tímidamente con la primera pareja, un par de gallos de buen tamaño pero de escasa vitalidad. Salieron a 20 euros y no pasaron de los 30 euros que abonó un vecino. «Noutros tempos pagábase bastante máis», comentaba entre el público otro que no pujó. El asunto se fue animando con la segunda pareja, algo más viva, que alcanzó una cotización superior. Llegaron a los 35 euros. Pero el desmelene llegó con la tercera, donde dos pujadores fueron lanzándose, de euro en euro, hasta cerrar la venta de los animales en 45 euros.

Después tocó divertirse en un campo da festa al más puro estilo tradicional, con su cantina, sus puestos de rosquillas anudadas y sus vendedores de frutas. Y el bar, claro, muy concurrido, además de una pulpeira para los que querían quedarse a comer.

Hubo música y baile para rato. Y hoy más. La misa es a las doce y media y la sesión vermú corre a cargo de Abanico, que repite con Máster de noche.

Festejos en A Piña

La subasta de gallos también fue la actividad más vistosa del programa con el que los vecinos del lugar carballés de A Piña rindieron homenaje ayer a san Adrián. Como marca la tradición, tras la misa grande de la una de la tarde, que puso fin a una maratoniana mañana litúrgica, los feligreses tuvieron ocasión de pujar por los ejemplares donados por algunos de ellos.

La orquesta Súper Star animó la sesión vermú y la verbena de una jornada en el que el apartado musical se completó con la participación de la Coral Polifónica de Bergantiños en la misa solemne.

la celebración de san adrián