Además de ser una gran persona, es el cura de Alborés, Os Baos, Brandomil, Brandoñas y Muíño, parroquias de Mazaricos y de Zas, donde es muy querido por sus feligreses. Es natural de Costa da Marfil y tiene una ONG para ayudar a su gente. Merece la pena echarle una mano en su labor humanitaria. Trata de que su país pueda salir de la situación en la que la han sumido los violentos. Su lucha es la paz.
El mirador de Gures está abonado a la basura. Desde hace tiempo, la gente deposita residuos en un lugar con unas vistas impresionantes. Sin embargo, es difícil contemplar con agrado toda la belleza de la rada fisterrana teniendo al lado o muy cerca los desperdicios que los desaprensivos suelen dejar en los lugares próximos. La basura es el peor enemigo de nuestros paisajes.
La cascada de O Ézaro recobro la vida. Ferroatlántica ha abierto las compuertas para mantener un caudal mínimo indicado por la Consellería de Medio Ambiente. La desembocadura del río Xallas se convertirá sin duda en un lugar de peregrinación para los románticos y los amantes de los buenos paisajes. El aporte de agua es suficiente para que la Fervenza recupere su magia de siglos.
Si la basura es una lacra que no somos capaces de sacarnos de encima, el vandalismo no le va a la zaga. Parecemos el país del desprecio a los espacios para el disfrute público. Las Administraciones colocan bancos, papeleras, mesas, asadores y paseos más o menos bonitos, y los gamberros se empeñan en destrozarlos para desgracia de la mayoría de ciudadanos.