El párroco de Brandomil, Brandoñas y Muíño, Desiré Koaukou, inicia una campaña para socorrer a su país
14 abr 2011 . Actualizado a las 10:53 h.Durante más de cinco meses Costa de Marfil ha estado sumido en un sangriento conflicto armado entre los partidarios del presidente saliente, Laurent Gbagbo, que se negaba a dejar el poder, y las del mandatario electo el pasado mes de noviembre, Alassane Ouattara. Gbagbo ha sido finalmente detenido y todo parece indicar que las aguas volverán a su cauce. Por detrás quedan, sin embargo, demasiadas víctimas. Por delante, mucho trabajo. Queda mucho por hacer y los habitantes de Costa de Marfil no las tienen todas consigo, pero con lo que sí cuentan es con el tesón de un compatriota que a principios de los noventa se vino a España con los padres carmelitas. Él es Desiré Koaukou Tenoh, cura de las parroquias de Alborés y Os Baos, en Mazaricos, y Brandomil, Brandoñas y Muíño, en Zas. Un hombre querido por sus feligreses que está convencido de que la generosidad de la Costa da Morte servirá para que Costa de Marfil salga adelante.
Desiré, que ha seguido muy preocupado las noticias sobre su país, preside la oenegé Egueire, una entidad que hace honor a su nombre, que en griego significa «levántate, ponte de pie, vive» y que tiene como objetivo darle un futuro a los más jóvenes de África. Por eso, la agrupación, con Desiré a la cabeza y muchos vecinos dispuestos a ayudar, ha puesto en marcha una campaña de ayuda y recogida de fondos. Las donaciones pueden realizarse consultando la página web de la entidad, www.egueire.org, donde, además, explican todos los proyectos que quieren poner en marcha. Convencidos de que la Costa da Morte, ayudará a su tocaya de Marfil
iniciativa humanitaria oenegé egueire