El sector ganadero prevé este año una crisis sin precedentes

CARBALLO

Los excedentes podrían provocar que la industria deje de recoger leche

08 oct 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Hace solo un año, el precio de la leche batía récords en la Costa da Morte. Se alcanzaban cotizaciones sin precedentes. Durante meses fue normal que se pagaran 50 céntimos por kilo, con lo que la subida de los costes de producción no afectó a las cuentas de la explotación. El sector prevé para los próximos meses una bajada del precio a la que pocos podrán hacer frente. Contrato. Es el caballo de batalla de los sindicatos. Juan García, de Xóvenes Agricultores, señala que es imprescindible un acuerdo entre productores e industria, puesto que los primeros se encuentran completamente desprotegidos. Explica que ahora «levan o leite e páganche 30 días despois, sen saber exactamente o que vas cobrar». Los acuerdos son puramente verbales, por lo que una de las principales demandas es la existencia de un acuerdo escrito.

La industria, según el ganadero Xusto Sánchez y los representantes sindicales, alega que tienen los almacenes llenos de leche comprada en Francia y en Portugal. Por ello, centrales como Río han dejado de recoger leche en zonas próximas a Santiago y amenazan a los ganaderos de Ordes, con lo que los granjeros de la zona ven con preocupación la situación.

Le leche que hace unos meses se pagaba a 50 céntimos está ahora a 36, más calidades e IVA. En una situación normal no habría demasiadas dificultades, pero los costes de producción se han disparado. La alimentación se ha encarecido extraordinariamente, lo que ha hecho que haya más plantaciones de maíz.

Muchos ganaderos han alquilado tierras para sembrar forraje de cara al invierno. Los fertilizantes son otra carga, ya que en pocos meses han triplicado su valor.

La peor parte de la crisis la están sufriendo las explotaciones más endeudadas. Hace unos años, la adquisición de cuota, cuando el Gobierno central prohibió transacciones entre particulares, ya supuso un importante desembolso. Después hubo que realizar reformas en las explotaciones a causa de la Lei do Solo de Galicia. Hace solo unos meses, los altos precios de la leche provocaron en el sector un sentimiento de euforia, según explica Xusto Sánchez, que hizo que muchos adquirieran ganado para incrementar la producción. También hubo un aumento en las ventas de maquinaria.

Los sindicatos advirtieron que esa forma de actuar podría dar problemas. A pesar de eso, las novillas alcanzaron precios récord. Acuerdos. Luis García, director del Cento de Promoción Rural EFA Fonteboa de Coristanco, considera que ante este panorama se impone llegar a un acuerdo, pues todos los actores implicados son interdependientes: los productores necesitan a la industria y esta precisa producto de aquí; tienen que ponerse de acuerdo en lo fundamental, pues de lo contrario podemos acabar matando la gallina de los huevos de oro, por un afán desmedido de lucro.

Según explica Luis García, tanto los productores como la industria saben que el problema de la leche no es solo de precios, sino más bien de estructura de costes de producción. En definitiva, de gestionar adecuadamente una empresa y de establecer unas normas consensuadas y que se respeten, por el bien de ambas partes y por la pervivencia de un sector de importancia estratégica en el rural gallego, el lácteo.