El faro de Fisterra ha recibido desde el pasado miércoles cerca de siete mil visitas y para hoy se espera una gran afluencia de público. El Cabo es el enclave más visitado de la zona y eso repercute en todo el municipio. En los hoteles no hay habitaciones libres y el Museo da Pesca, en el castillo de San Carlos, es la instalación a la que han acudido más turistas. Hasta ayer había vendido más de 600 entradas. Solo el jueves y el viernes pasaron por el museo 440 personas.
También hubo mucha actividad en el castillo de Vimianzo. Los artesanos se mostraron satisfechos tanto por las visitas como por las ventas realizadas.
Los Batáns do Mosquetín se vieron afectados por el mal tiempo. El jueves y el viernes reunieron a cerca de 300 visitantes, pero los accesos decayeron mucho ayer a causa de la lluvia.
Algo mejor fueron las cosas en las Torres do Allo. El museo sobre los pazos, que también gestiona la asociación Neria, ha sido una de las instalaciones con más interés para los turistas. El viernes santo estuvieron a punto de llegar a los 200 visitas y desde el miércoles todos los días se superaron el centenar de entradas.
También hubo expectación en la cascada de O Ézaro. Muchas personas contemplaron la apertura de la presa el viernes y ayer. También abre hoy a partir de las 12.30 horas.