El amor también sirve para impulsar la economía local

CARBALLO

Los comercios de la comarca compaginan los últimos días?de rebajas con el tirón del día de San Valentín

14 feb 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Según una de las definiciones del diccionario de la Real Academia Española, el amor es un «sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear».

«Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo», dice otra de las 14 acepciones del término. Alusiones a la economía, ninguna, pero lo cierto es que el amor tiene mucho de económico. Al menos el día de San Valentín, jornada en la que los comerciantes -y cada año más- consiguen un mini-agosto que, tal y como están las cosas, no les viene nada mal. La temporada no ha ido bien y tampoco las rebajas, así que los empresarios, al menos los de Carballo, parece que han echado el resto con la esperanza de que los enamorados se rasquen el bolsillo.

Por eso, desde hace una semana los corazones y el color rojo han conquistado los escaparates de Bergantiños. «El amor está en el aire», asegura el cartel que luce el escaparate de una conocida perfumería carballesa en la que, como en Navidades, han preparado packs especiales para un día como el de hoy. Y se venden. Al menos eso es lo que dicen en un comercio similar. «Muchos esperarán a última hora y comprarán cualquier cosa», confiesa una dependienta, mientras insiste que en lo que a regalos de amor -y de los otros también- se refiere, las mujeres suelen ser mucho más previsoras.

Pero ellos, en cambio, optan por los más originales. Como los que pueden comprarse en la tienda de regalos Nerio. «Aínda hai enamorados», reconoce María Mira justo después de atender a un joven. Se llevó uno de los cojines en forma de corazón que parecen haber conquistado el comercio. Una declaración en toda regla y un desembolso de casi 20 euros. Otros, explica Mira, también se llevan regalos algo más picantes, como gominolas con formas eróticas, pasta para cocer con las posturas del Kamasutra o incluso ropa interior comestible, igual a la que puede encontrarse en la sex shop de Cesáreo España, O Punto Galicia. «Desde tres euros hai algún xoguete, que a xente di que leva para acompañar regalos máis serios », explica.

Los peluches también siguen estando de moda, desde los más baratos, hasta un oso enorme -corazón entre los brazos, claro- por el que piden 35 euros en una tienda multiproducto. Allí también, ropa interior para ellas -repleta de transparencias-, algo más llamativa que la que lucen los escaparates de las corseterías, que también han encontrado en el 14 de febrero la excusa perfecta para sacar a la venta prendas mucho menos vendibles el resto del año.

Y es que el San Valentín sirve para venderlo todo, a pesar de que digan eso de que el amor no se compra. Sirve, por ejemplo, para recordar que cualquier momento es bueno para regalar gafas de sol porque, según reza el cartel del escaparate de la óptica Bergantiños, hay «miradas que enamoran».

Y para los clásicos: rosas rojas. Hoy un poco más caras, por cierto.?