El desastre del embalse de Fervenza podría afectar a los cormoranes

La Voz

CARBALLO

27 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La principal consecuencia de que el embalse de A Fervenza se quedase sin agua hace apenas dos semanas se vio de inmediato: la muerte de centenares de truchas y escalos. Otras, las jurídicas o administrativas (de haberlas) se producirán a medio plazo. Pero aún quedan algunas más, sobre las que apenas se ha reparado: la influencia sobre la colonia de aves que aprovechan el inmenso lago de agua dulce especialmente en sus migraciones.

Una de las personas que mejor conoce el embalse es Felipe Bárcena Varela de Limia. Naturalista, ornitólogo, investigador, colaborador de la Universidade de Santiago y de la Xunta, desde hace 22 años realiza los inventarios de aves en la Costa da Morte durante el invierno, primero para la Sociedad Española de Ornitología, después para el Icona y en la actualidad para Medio Ambiente.

Bárcena, que entre otros muchos títulos o cargos es funcionario del Banco de España, presidente del Patronato de las Cíes, fundador de Amigos de los Pazos y conde de Torrecedeira, señala que donde más se puede notar, y ya, la carestía de agua y la escasez de truchas es en la alimentación de los cormoranes (y de garzas, en menor medida). En efecto, el naturalista ha contabilizado en sus mediciones unos dos centenares de estas aves que aprovechan las Lobeira para dormir y el embalse para comer.

Estos cormoranes, que ya están llegando, son del tipo más grande que se conoce, procedente del norte de Europa, no los más habituales de la zona.- Bárcena explica que empezaron a llegar hace un tiempo, no mucho, y ahora van a más. Y si no encuentran la comida en Fervenza, deberán buscarla en otro lado.

El embalse es, para este experto, el principal de anátidas en Galicia desde hace dos o tres años. Otros que le superaban han mermado por la caza o los deportes náuticos. En el 2006, Fervenza albergó a unos 6.000 patos, entre cercetas, ánades reales o porrones. En principio, siempre que las lluvias sean copiosas y el salto se llene de nuevo, los patos no deberían verse afectados, aunque es algo que se sabrá en breve.