El Don Inda , remolcador, principal barco anticontaminación de la costa gallega y uno de los mejores barcos polivalentes de Europa, se encuentra estos días en dique seco en un astillero de Pasajes, en Guipúzcoa, debido a una parada técnica, la denominada varada anual. Al cumplirse un año de su puesta en marcha, el barco precisa de ciertas revisiones que, en este caso, durarán 15 días. Como salió hacia el País Vasco el 18 de este mes, estará de vuelta a principios del próximo mes de diciembre, según explicaron ayer desde Salvamento Marítimo.
Mientras tanto, el buque que lo sustituye en la Costa da Morte es el Alonso de Chaves , en la actualidad con puerto base en Gijón. Se trata de un viejo conocido en la zona, y que ha intervenido en multitud de remolques, ya que su botadura coincidió casi en el tiempo con el desastre del Cason en la costa de Fisterra, a la altura de Rostro, en la primera semana del mes de diciembre. El Alonso de Chaves tomó parte activa en el rescate del mercante. Se trata de un remolcador potente, pero está a años luz de las prestaciones en la lucha contra la contaminación del Don Inda , la joya de la corona marítima española junto a su gemelo el Clara Campoamor , destinado al Mediterráneo y que estos días actúa en la zona del Estrecho. Ambos fueron construidos en los astilleros Zamakona de Santurce. Junto al Alonso de Chaves , en Brens, se pudo ver también al Ibaizábal III , al parecer en tareas de asistencia puntuales al primero.
Es la segunda vez que el Don Inda sale, durante tanto tiempo, del su teórico puerto base en la ría de Corcubión. Porque, en realidad, atraca a veces en Muros, otras en Laxe y muchas simplemente fondea en la zona. El problema de la ría de Corcubión es la falta de calado suficiente. Tanto, que incluso el BNG planteó en mayo una pregunta en el Parlamento de Galicia al respecto.
La salida de Galicia que más le ha ocupado fue la que le llevó, entre agosto y septiembre, a la zona de Algeciras para participar en un rescate y vigilancia del chatarrero New Flame , y posteriormente participó en las tareas de búsqueda de los desaparecidos en un pesquero. En su lugar, ese tiempo atracó en Brens el Miguel de Cervantes, un gemelo del Luz de Mar, ahora en Canarias, y que fue el predecesor en la zona del Don Inda . Este buque es el resultado de una de las principales promesas a raíz del desastre del Prestige , hace cinco años justos.