La concentración de Bértoa permitió ver en acción a Zamora

La Voz

CARBALLO

19 ago 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

carballo | La exhibición de acrobacias sobre dos ruedas de Emilio Zamora congregó a varios cientos de personas, entre moteros y aficionados, en el polígono de Bértoa, en Carballo. A media tarde, las inscripciones en la motofesta que organiza la asociación Hoyasuka avanzaban a un ritmo contenido, pero se espera que durante la jornada de hoy se sumen nuevos pilotos que contribuyan a aumentar el espectáculo y la fiesta con el sonido de sus máquinas.

Zamora empleó en su espectáculo dos motos Ducati, que es la marca que lo patrocina y un quad de la firma Hyosung. Al mando de sus monturas realizó todo tipo de caballitos, trompos, invertidas y quemadas de rueda que mantuvieron la atención de los espectadores durante algo más de media hora. Las amagos que hizo la lluvia y la escasa inspiración del piloto conquense hicieron que el público no se implicase tanto como suele ser habitual en este tipo de espectáculos. Aunque nadie le quitó ojo a las piruetas de Zamora, los aplausos fueron muy esporádicos y estuvieron más motivados por los guiños del piloto que por sus maniobras. A buen seguro que tendrá la ocasión de sacarse la espina en las citas que todavía le quedan en Carballo y en las más de 50 exhibiciones que tiene programas para este año.

En este tipo de reuniones el espectáculo suele estar más en el aparcadero de monturas que en las casetas que instala la organización. En el recinto de Carballo se pudieron ver máquinas tan espectaculares como la Honda CBR RR, las Yamaha R1 y R6, la Suzuki GSX, o la Kawasaki Ninja. Pero no sólo de superdeportivas viven las concentraciones, por lo que en el polígono de Bértoa también se pudieron ver otra tipo de motocicletas estilos choper como la Harley Davidson o de tipo rutero como la mítica Honda Goldwing.

Más que motos

Además de motos y más motos en la recinto donde se celebra la cita hay instalados juegos hinchables para los más pequeños carpas con exhibición de todo tipo de complementos y, por supuesto una barra en la que tomarse un refrigerio. Todo el que desee acercarse hasta Carballo todavía tendrá la oportunidad de participar en el desayuno que se celebra mañana y en la ruta más esperada del fin de semana que será la que lleve a los integrantes de la comitiva hacia las áreas de Razo y Baldaio, que son muy propicias para darse un paseo en moto. Allí a pie de playa habrá pinchos para todos los inscritos, que también disfrutarán de la comida de una comida, una vez que estén de vuelta en Carballo.

Los moteros que se dejaron ver ayer por la concentración no dejaron de mirar al cielo en toda la tarde y sus peores sospechas se confirmaron a primera hora de la noche cuando empezaron a caer las gotas de esa fina lluvia que hace tan complicada la conducción de las motocicletas.

A pesar de ser la primera edición y de que el tiempo no ha acompañado demasiado, la cita de Carballo sirve para comprobar la enorme afición que hay en la Costa da Morte por el mundo de las dos ruedas. Ésta es la cuarta gran concentración que se celebra en la comarca en lo que va de verano, después de Olveira, Laxe y Ponteceso, y en todas ellas se ha percibido un aumento en el número de inscritos y mucha participación por parte de los aficionados. El número de motos matriculadas también ha crecido en el último año.