Los buñeses hicieron historia

La Voz

CARBALLO

El pulso de la Costa da Morte Más de cien personas nacidas en Buño entre 1941 y 1956 volvieron a reunirse ayer después de que muchos llevasen más de 40 años sin verse. La emoción fue plena

12 ago 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

Hay quien dice que no hay mayor placer que disfrutar de los placeres baratos y no le falta razón. Quedó demostrado ayer y la noche del pasado viernes, cuando tres de las citas previstas en la comarca, congregaron a un montón de gente dispuesta a pasarlo bien por muy poco. Y en los tres casos lo consiguieron. Noche de estrellas El primero fue en Cabana, donde el Ayuntamiento organizó una actividad muy barata y muy exitosa, prueba de que con grandes ideas es más que suficiente para que los vecinos estén satisfechos. Más de cien emplearon las primeras horas de la noche en mirar las estrellas desde el mirador del monte Gontón, donde pudieron disfrutar de la lágrimas de San Lorenzo, la lluvia de perseidas que siempre nos visitan por estas fechas. Con los vecinos estuvo también el físico Jorge Mira , que explicó a los asistentes algunos de los misterios del firmamento. Viejos amigos También fue un auténtico éxito la reunión de buñeses y buñesas organizada por Emilio Calvo Pan , que con gran esfuerzo ayer logró reunir en Buño a más de 110 personas nacidas en la localidad entre 1941 y 1956. Muy pocos viven en el municipio, así que imaginen las caras de sorpresa y emoción cuando ayer por la tarde se fueron reencontrando. Llegaron de A Coruña, Madrid, Santiago, Carballo y de un sinfín de puntos de toda la geografía española. Incluso acudió el presidente del centro gallego de Montevideo, Manuel Calvo Pan , hermano del organizador. Viejos amigos, que hacía más de 40 años que no se veían volvieron a reencontrarse, y en muchos casos, como es lógico después de tanto tiempo, les costó reconocerse, pero rápidamente, se abrazaron, besaron e incluso lloraron recordando anécdotas del pasado. Se juntaron en la Mostra da Olería, donde hicieron una ofrenda floral, y también recordaron viejos juegos, como la mariola, la peonza o la comba, que algún valiente se atrevió a probar y viajar en el tiempo hasta su niñez. Después asistieron a una misa oficiada por el párroco, Eliseo López Varela , y cantada por Manolo Cancela , que emocionó a muchos. No es de extrañar que Emilio Calvo se mostrase especialmente orgulloso de la cita, que acabó con una fantástica cena en el restaurante Aldeola, a la que también asistió el alcalde malpicán, José Ramón Varela Rey . Hubo baile, pero, sobre todo, hubo tiempo para ponerse al día de todo lo ocurrido en los últimos años. En grande también se lo pasaron los vecinos Lema que participaron en la mejillonada organizada por la comisión de fiestas. En total se repartieron 1.200 kilos de este sabroso bivalvo y, para hacer la digestión, disfrutaron de un baile amenizado por el Dúo Omega. También hubo queimada y fiesta hasta bien entrada la noche.