Como todos los años, es muy probable que hoy, a partir de las dos de la tarde y si el tiempo acompaña, comenzará a formarse una larga cola en el campo da feira de A Trabe. ¿La razón? La tradicional Feira das Fabas que un año más, y con éste van 14, se celebra en Ponteceso. Tal ha sido el éxito de ediciones anteriores que en esta ocasiones el encargado de la organización, Luis Antonio Pose Verdía, ha decidido hacerlo todo a lo grande. La carpa, para que el público pueda resguardarse en caso de que llueva -el tiempo, por tanto, no será impedimento para asistir-, será 150 metros mayor que la del año anterior y para que esta vez no haya problemas y algunos de los visitantes se queden sin probar a las protagonistas de la fiesta, se cocinarán unos cien kilos más de fabas. En total, la enorme perola contendrá más de 1.400 kilos de habas, carne y demás legumbres. Y si todo va bien, se servirán más de 2.000 raciones. Previamente, los comensales, salvo aquellos que donaron productos para elaborar la enorme fabada, deberán pagar seis euros, cantidad que les dará derecho no sólo a degustarlas, sino que también les proporcionará un plato y una taza de cerámica de Buño -el año pasado un contratiempo de última hora les obligó a traerlas de Zaragoza-, una cuchara, pan y vino a raudales. Los gaiteiros de Tallo serán los encargados de amenizar una comida que los organizadores confían en que esta ocasión se desarrolle sin incidentes -un pequeño incendio sin consecuencias obligó el año pasado a retrasar la degustación-. Además, se repartirán 540 euros en premios. Durante toda la mañana, el jurado recogerá las muestras de las habas de las tres categorías (de riñón, del país y asturiana) del concurso. La mejor cosecha de cada variedad recibirá 90 euros; los segundos clasificados, 60, y los terceros, 30 euros.