Un joven boticario para recuperar la farmacia que Salcedo echaba de menos

María Hermida
María Hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

RIBEIRA

Ramón Leiro

Emilio Pozas, natural de Ribeira, reabre la botica y lo hace en un lugar estratégico

28 sep 2024 . Actualizado a las 22:43 h.

Se llama Emilio Pozas, tiene 32 años de edad y, aunque habla con soltura y aparenta estar tranquilo, la procesión debe ir por dentro. Porque Emilio está a punto de comenzar una etapa en su vida tan apasionante como seguramente frenética. Este boticario, natural del norte de la ría de Arousa, de Ribeira, va a afrontar un reto en Pontevedra. Ha comprado una farmacia en la parroquia de Salcedo, que llevaba cerrada unos cuantos meses, y se propone reabrirla para que los vecinos dejen de echarla de menos, tal y como algunos le han manifestado que les ocurría. Emilio está con los preparativos a cuestas y su previsión es levantar el telón el lunes. «Estoy colocándolo todo, la verdad es que estoy muy ilusionado, espero que todo vaya bien», confiesa.

Emilio, que es el primer boticario de su familia —aunque tiene genes de sanitario, ya que su padre es médico— remató la carrera de Farmacia y estuvo trabajando en Canarias, Madrid y Vigo. Hace un tiempo empezó a buscar farmacias en distintos puntos de Galicia para poder invertir y hacerse con una oficina. Vio algunas en el corazón profundo de Galicia y se quedó finalmente con la de Salcedo, en Pontevedra, un híbrido entre la esfera urbana y la rural. Se lanzó a invertir con tanto vértigo como ilusión: «Cogí una hipoteca que pagaré muchos años y tiré hacia adelante», confiesa este boticario.

Se encontró con algunas trabas, ya que la botica no podía continuar en el sitio donde estaba emplazada en Salcedo puesto que no cumplía los requisitos que le exigían. Así que le tocó buscar local y realizar los trámites oportunos para reabrir la oficina. Le gustaría que todo fuese más rápido, pero la burocracia tardó lo suyo y finalmente la farmacia estuvo ocho meses cerrada. Ahora toca volver a poner el negocio en funcionamiento y además en una nueva ubicación.

Emilio eligió un lugar bien visible y accesible. La nueva farmacia de Salcedo está en plena carretera N-550, la que una Pontevedra y Vigo y por la que pasan al día más de 25.000 vehículos. La botica se encuentra en la proximidad de los concesionarios de Peugeot y Citroën, y con sitio para aparcar en las cercanías. Así que él espera que dé servicio tanto a personas de Pontevedra como de municipios limítrofes como Vilaboa o Soutomaior. Dice que le hace especial ilusión que los vecinos de Salcedo cuenten con este local y que por eso les está informando de la reapertura. Se pasó ya por el centro social y no deja de hablar con todos los que se encuentra.

Detrás del mostrador, cuenta ya las horas para su estreno en Pontevedra. «El lunes espero comenzar», dice el boticario.