Adiós a la pintura surrealista del artista de Ribeira más internacional

Marta Gómez Regenjo
marta gómez RIBEIRA /LA VOZ

RIBEIRA

CARMELA QUEIJEIRO

El pintor, fallecido a los 89 años, serán enterrado este miércoles

16 may 2023 . Actualizado a las 15:25 h.

«Aínda segue a ser máis coñecido fóra ca en Galicia, polo que hai que darlle o valor que ten». Con estas palabras reivindicaba hace tan solo unas semanas el artista Alfonso Costa a una de las grandes figuras de la pintura en Galicia, Manuel Ayaso (Aguiño, 1934), hijo predilecto del Concello de Ribeira y su artista más universal que falleció ayer a última hora dejando un enorme vacío, pero también un legado inmenso y un estilo claramente reconocible que le ha acompañado desde los inicios de su carrera en Estados Unidos.

Con tan solo 14 años emigró junto a su familia y fue al otro lado del charco donde inició su formación artística. Allí forjó una prolífica carrera y su obra no tardó en ser reconocida. En su historial cuenta con incontables exposiciones en importantes salas y museos, como la Cober Gallery, New Jersey State Museum o la Forum Gallery de Nueva York. Fue mucho más tarde, ya en los años 90, cuando realizó su primera exposición en la Casa de Galicia en Madrid, y luego en la Casa da Parra de Santiago. A partir de ese momento su obra y su particular mundo comenzarían a ser reconocidos también en su tierra.

Desde entonces, no han parado de sucederse los galardones y reconocimientos. El pasado agosto era nombrado oficialmente hijo predilecto de Ribeira, la tierra que siempre le inspiró al otro lado del Atlántico; y hace un par de meses recibía un último homenaje en A Coruña con motivo de la exposición Manuel Ayaso. Testemuña do invisible, una recopilación de 84 obras, algunas de ellas inéditas, que repasaba su extensa y prolífica carrera.

Trabajador incansable

En su haber cuenta con numerosos galardones, el último, el Premio de Artes Plásticas da Crítica de Galicia que recibió a finales del año 2021.

Fue también un trabajador incansable. No en vano, pese a su edad y a que su estado de salud era delicado desde hace algunos meses, siguió pintando hasta el último aliento.

Hace solo unos días, el pasado fin de semana, se inauguraba en el Museo de Artes do Gravado á Estampa Dixital de Ribeira una exposición en la que Ayaso, junto a Alfonso Costa, rendía su particular homenaje a Pablo Picasso con una selección de obras que recrean temas y estilos picassianos, como la tauromaquia, el cubismo, el circo o el Guernica.

Siempre mantuvo que Picasso era su ídolo, y de él admiraba que «estaba sempre mudando de estilo, pero na súa obra permanecía a esencia que permitía identificalo».

El aguiñense en cambio siempre mantuvo un estilo muy particular y una mirada surrealista que hacen de sus obras piezas muy reconocibles: «Cando un crea un mundo persoal, como fixen eu, penso que xa non hai volta atrás, non se pode mudar», contaba el propio Manuel Ayaso. A modo de legado, deja una enorme colección compuesta por unas tres mil obras, que en el 2020 cedió al Concello de Ribeira.

Ahora que de sus pinceles ya no brotará más arte estas obras adquieren, si cabe, un valor todavía mayor.

Los restos mortales de Manuel Ayaso están siendo velados en el Tanatorio Crematorio do Barbanza, desde donde partirá mañana, a las 18.15 horas, el cortejo fúnebre rumbo al cementerio municipal de Ribeira, para el entierro. El jueves, a las 19.30 horas, se oficiará un funeral en la iglesia parroquial de Santa Uxía.