La Comisión Mixta debe considerar su puesta en marcha como prioritaria, una vez que desde Madrid informen de cuántas unidades nuevas se le asignan a Galicia para este 2022
28 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Nadie niega la necesidad de que en Ribeira es perentorio crear un cuarto juzgado mixto que permita desatascar el colapso que padecen las otras tres salas de Santa Uxía. Así lo confirman fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), la Vicepresidencia Primeira de la Xunta, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y los sindicatos mayoritarios. Con voz unánime se posicionan a favor de la creación de esta nueva sala, aunque con las reservas de que para llevarla a cabo no vale solo con tener buena voluntad.
El principal escollo a salvar es que la Comisión Mixta de Xustiza —formada por el TSXG y la Xunta, y presidida por José María Gómez y Díaz-Castroverde y Alfonso Rueda—, incluya ese cuarto juzgado en las propuestas que se remiten al Ministerio de Justicia. Desde la Vicepresidencia Primeira afirman que el Gobierno central aún no les ha comunicado el inicio de la tramitación del proyecto de creación de nuevas unidades para el 2022. Una vez lo haga, indican que se analizarán las «cargas de traballo dos diferentes xulgados e o número de unidades que o Ministerio lle asigne a Galicia».
En segundo lugar
Lo cierto es que en la última petición de la Comisión Mixta se antepuso la creación de un tercer juzgado de lo Mercantil en A Coruña y dos plazas de magistrado en Lugo y Ourense. La cuarta sala de Ribeira quedó en un lugar secundario, pero, por primera vez, sí se reconoció su necesidad.
Lo confirma también la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), que a finales del 2021 se reunió con el presidente del TSXG, José María Gómez y Díaz-Castroverde, quien también abogó por la creación de esa sala mixta en Ribeira.
Desde el Concello confirman una vez más que apuestan por la este cuarto órgano, que ayudaría a resolver los 4.629 casos que durante el 2020 —los últimos datos hechos públicos por el TSXG— registraron los otros tres juzgados, que se suman al problema de la alta movilidad que existe entre los jueces, lo que también frena la resolución de casos.
La creación es competencia del Gobierno central y a los ministerios de Hacienda y Justicia
Una vez solventado el escollo de la Comisión Mixta entre TSXG y Xunta, sería el momento en que la pelota quedaría en el techo de los Ministerios de Justicia y Hacienda, que deberían dar su visto bueno a la creación de la cuarta sala en Ribeira y consignar el dinero que sería necesario para su puesta en marcha.
Desde la Vicepresidencia Primeira confirman que es en Madrid donde está la competencia de crear los juzgados, de ahí que en sus manos quede la posibilidad de reforzar, en acuerdo con el TSXG, ciertos lugares para aliviar la sobrecarga puntual o estructural de trabajo. Es el caso del Juzgado Número 1 de Ribeira donde, apuntan, se reforzó con dos funcionarios.
Desde el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) también valoran positivamente la creación de la sala en Ribeira. Así lo afirman desde UGT que, dicen, en las últimas visitas a la localidad de las comisiones de seguimiento ya se destacó la necesidad de ese cuarto juzgado mixto.
Otro de los problemas a solventar es la ausencia de espacio suficiente
Desde la Unión General de Trabajadores (UTG), Sergio Riveiros, del departamento de Xustiza Galicia reconoce que en el hipotético caso de la aprobación de la creación del citado cuarto juzgado, al instante, habría un nuevo problema a solventar: la falta de espacio en el inmueble que acoge las tres salas mixtas.
«No hay espacio suficiente, actualmente ya están en situación precaria porque hay limitaciones», destacó el sindicalista, que confirma que sería necesario ampliar el inmueble, aunque «desconozco cómo. La posibilidad de construir una planta más no creo que sea viable. Creo que cuando se inauguró el edificio ya se mostró que no se ajustaba a las necesidades de los trabajadores».
Sobre la posibilidad de utilizar otro edificio para alojar la cuarta sala, Riveiros afirma que «separarla no es una opción porque da lugar a problemas de comunicación y tampoco es bueno para los vecinos. En A Coruña hace años se decidió cambiar el Registro Civil de sitio y aún hay gente que a día de hoy sigue equivocándose. Es una situación que se antoja difícil de solucionar».
