El PP denuncia que la farmacia del edil Vicente Mariño expidió certificados de test de covid sin autorización

RIBEIRA

CARMELA QUEIJEIRO

La formación exige explicaciones por lo que califica de falta de deontología profesional que puso en riesgo de ser sancionados a clientes y locales hosteleros

29 jul 2021 . Actualizado a las 20:57 h.

Las farmacias que se adhieran al protocolo de Sanidade podrán, a partir de hoy, expedir justificantes con el resultado del test de antígenos que hagan a los clientes que así lo soliciten y, previa autorización del usuario, los profesionales subirán los datos a la plataforma del Sergas. Sin embargo, el PP de Ribeira denunció ayer que la farmacia del edil del PBBI Vicente Mariño de Bricio estuvo emitiendo esos certificados el pasado viernes, pese a la existencia de una circular distribuida esa misma jornada a las boticas por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña informando de que se estaba trabajando en la implantación de un procedimiento para su «próxima puesta en marcha».

La teniente de alcalde, María Sampedro indicó que el establecimiento estuvo dando justificantes sin autorización ni validez jurídica: «Sabía que non facía o correcto, poñendo en risco de sanción aos clientes que o recibían e aos locais hostaleiros». Sampedro recalcó el hecho de que fueron expedidos la víspera del Día da Dorna y se preguntó: «Coñecían esas persoas que ese certificado que recibían non era válido para acudir a locais de hostalaría?».

En nombre del Partido Popular, María Sampedro, que estuvo acompañada por el edil Ramón Doval, reclamó explicaciones a Vicente Mariño calificando los hechos de falta de deontología profesional. Aseguró que tuvieron conocimiento a raíz de las llamadas de diversas personas e, incluso, mostró algún certificado emitido por el propio Vicente Mariño con su firma y el sello del establecimiento.

Aquilo foi un encontro de amigos, esta é unha actividade pola que se cobrou»

Recordó lo sucedido hace solo unos meses, cuando Mariño exigió la dimisión de la edila del PP Ana Ruiz por haber dejado a su hijo un local para una fiesta a la que asistieron más personas que las permitidas. En este sentido, María Sampedro subrayó que su compañera dejó su cargo: «Aquilo foi un encontro de amigos, esta é unha actividade pola que se cobrou».

También aludió al hecho de que Sanidade establece que las farmacias recibirán dos euros por cada certificado expedido: «Cando Vicente Mariño cobrou sete polo test e tres polo xustificante» y recalcó que tampoco se cumplieron las condiciones del protocolo que entra hoy en vigor.

Asimismo, indicó que llamaron al colegio de farmacéuticos, donde les indicaron que estaban al corriente de los hechos, y a la Secretaría Xeral Técnica de la Consellería de Sanidade.

Un malentendido

Por su parte, Vicente Mariño dijo que fue un malentendido. Manifestó desconocer la circular del colegio oficial emitida el viernes a las farmacias e indicó que «entendimos que a partir de que podían venderse los test se podía expedir un certificado». En este sentido señaló que los clientes demandaban algún justificante para poder acceder a los locales de hostelería.

Subrayó que no cobraba por el certificado, sino que comercializa a 10 euros los test individuales.

Asimismo, explicó que el sábado por la tarde recibieron una llamada del Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña indicando que no podían emitir certificados «y dejamos de hacerlo».