La víctima tuvo que ser operada cuatro veces en una pierna y continúa de baja
04 jul 2020 . Actualizado a las 19:51 h.Primero se apropiaron de una moto en un garaje y luego la utilizaron para desplazarse hasta la zona ribeirense de Oleiros y atracar una gasolinera, en la que dispararon con una escopeta al empleado, para luego robarle, llevarse la caja registradora y dejarlo allí tirado. Ocurrió en enero del año pasado y el fiscal considera a los dos acusados —un vecino de A Pobra D. G. S., de 29 años de edad, y otro de Ribeira, P. F. M., de 31—, autores de sendos delitos de robo, uno de lesiones y otro de tenencia ilícita de arma larga, a los que se añade para el segundo imputado otro más porque se encontró en su vivienda una pistola para la que no tenía licencia. Por eso pide para él 21 años de prisión, mientras que rebaja a 19 la pena para su compañero.
Ambos se sentarán la próxima semana en el banquillo de la sección sexta de la Audiencia Provincial donde deberán responder por los hechos ocurridos el 17 y el 19 de enero del 2019. En la madrugada del primer día se colaron en un garaje comunicaron y robaron una motocicleta KTM, un casco, un peto protector, así como una camiseta y un pantalón rojos. A continuación, llevaron el vehículo al domicilio de P. F. M. y lo cubrieron con una sábado. Dos jornadas más tarde, sobre las 1.15 horas, cogieron la moto y se desplazaron, llevando una escopeta de caza de cañones superpuestos del calibre 16, hasta una gasolinera situada en la parroquia de Oleiros, donde D. G. S. encañonó al empleado y luego le disparó en una pierna.
El trabajador, de 22 años, cayó al suelo a consecuencia del impacto, y allí el joven pobrense volvió a apuntarle con la escopeta para pedirle el dinero que portaba, entregándole aquel la cantidad de 70 euros que tenía en su bolsillo, y diciéndole que había más dinero en la caja, temeroso de que le quitase su teléfono.
Escapada
Acto seguido, el acusado se metió en el establecimiento de la estación de servicio y robó la registradora, para luego subirse a la moto y junto a su compañero escapar por la carretera AC-550 en dirección Porto do Son, aunque a la altura del hospital tomaron una pista forestal.
En las jornadas posteriores al atraco, intentaron deshacerse de la motocicleta desmontándola, pero varias de las piezas del vehículo, así como la ropa empleada en el robo fueron localizados en el domicilio de D. G. S. en la zona pobrense de O Campiño. Además, en el registro de la vivienda del segundo acusado se halló una pistola para la que no tenía licencia.
Graves secuelas
El empleado de la gasolinera todavía se encuentra a tratamiento por los graves daños sufridos en su pierna. Ha tenido que ser operado en cuatro ocasiones y tiene importantes secuelas. Por este motivo, el fiscal solicita a los dos acusados que lo indemnicen con 28.400 euros, además de hacerse cargo de la factura hospitalaria. También deberán ingresar a la compañía aseguradora de la estación de servicio los 1.052 euros sustraídos de la caja.