Rosa Argibay: «Sentín golpes no bar, coma se houbese obras, baixei co can e vin que rompera o cristal»

Ana Gerpe Varela
a. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

RIBEIRA

CARMELA QUEIJEIRO

La dueña del negocio hostelero Brétema de Ribeira explicó que el ladrón salió huyendo en cuanto sonó la alarma

20 nov 2019 . Actualizado a las 09:43 h.

Una veintena de años lleva abierto el establecimiento hostelero Brétema de Ribeira, emplazado en la zona de Bandaorrío, y su propietaria, Rosa Argibay, explica que el sábado fue la primera vez que alguien entró por la fuerza para robar. Hacerlo no resulta sencillo porque el local tiene una puerta de seguridad en el exterior y, en la parte de la terraza, cristales blindados, además de alarma. Sin embargo, el delincuente no escatimó en esfuerzos, pero Rosa Argibay tampoco se dejó vencer por el miedo.

La hostelera relata lo sucedido: «Eran as sete e media da mañá. Sentín golpes no bar, coma se houbese obras, baixei co can e vin que rompera o cristal». Previamente salió al balcón, pero al no ver a nadie se dirigió al local: «Entrou pola terraza, foi poñer un pé dentro do negocio e saltou a alarma. En canto a escoitou, marchou correndo».

Mientras bajaba las escaleras con su perro, Ares, Rosa Argibay no perdió el tiempo y llamó a la policía para avisar: «Chegaron ao momento, primeiro a local e, acto seguido, a nacional».

Detención inmediata

El autor de los hechos, que acto seguido probó fortuna en una floristería de la calle Colón, fue detenido por los agentes poco tiempo después.

Se da la circunstancia de que el acusado, un vecino de Aguiño de 39 años, ya había sido detenido y puesto a disposición judicial el viernes por entrar a robar en una inmobiliaria de Miguel Rodríguez Bautista, de la que se llevó 300 euros y una cámara de vídeo, objetos que pudieron ser recuperados.

Tras su segundo arresto por los mismos hechos, la jueza decretó prisión provisional.