La cofradía no aceptaba la obra en As Carolinas y colectivos como la patronal la veían bien
02 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Divididos estaban los ribeirenses hace 25 años. El motivo de los desencuentros era la construcción, en la zona de As Carolinas, del puerto deportivo. La cofradía se posicionó radicalmente en contra con esta localización, argumentando que el relleno afectaría a los bancos marisqueros. Los trabajadores del mar no dudaron en protagonizar un encierro en el pósito en señal de protesta. El colectivo llegó a cifrar en mil millones de las antiguas pesetas las pérdidas que habían ocasionado actuaciones realizadas con anterioridad en el litoral.
Otros colectivos como la asociación de empresarios se mostraban a favor de la actuación. Argumentaban que el puerto deportivo era una infraestructura imprescindible para el futuro turístico de la ciudad. Tras meses de negociaciones, la actuación se materializó y supuso la construcción de cuatro líneas de pantalanes, un depósito de embarcaciones y la sede del club náutico. Las instalaciones fueron inauguradas al año siguiente.