Las cien guerreras de las traineras

RIBEIRA

CESAR TOIMIL

Cinco clubes gallegos luchan para asentar una disciplina que este año alcanzó el centenar de fichas

31 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuatro temporadas después de que la Liga Galega de Traineras (LGT) diera el pistoletazo de salida a la competición femenina, cinco clubes (Ribeira, Cabo-Puebla, Vilaxoán, Perillo y Mugardos), y un centenar de remeras, han dado un paso al frente para asentarse en Galicia. Con mucho camino por delante, y a pesar de que reconocen que la tarea es quimérica, todos están dispuestos a afrontarla. Lograrlo, sin embargo, pasa por esas cien guerreras, sin ellas no habrá futuro.

«Estanse dando pasos moi grandes, pero debemos ter paciencia e seguir traballando como ata agora». El que habla es Mario Vidal, portavoz de Cabo de Cruz, institución que lleva desde los años 90 apoyando el remo femenino. Conoce a la perfección el reto de reunir a 14 jóvenes para sacar una trainera. Es por esto que los boirenses, ante la falta de efectivos, se unieron al Club Remo Puebla para lograrlo.

«Isto mellorou moito. Estase avanzando», afirma el vocal, que destaca que la piedra más importante para apuntalar los cimientos del remo femenino pasa por las propias deportistas: «Necesítase do compromiso das remeiras para que as directivas poidamos traballar. Os patrocinadores e Administracións teñen predisposición para apoialas».

No es el único que hace hincapié en esta cuestión. Sergio Gómez, vicepresidente de Perillo, pone como ejemplo el caso de Chapela y Cabana, dos conjuntos que en la temporada 2017 sacaron trainera femenina. Esta año, ante la falta de integrantes, no pudieron repetirlo: «Avánzase, conséguense resultados, pero falta bastante para asentarse. Hai moitos clubs que teñen que tirar de rapazas de fóra. É moi difícil ter 15 rapazas propias».

Para el dirigente coruñés citas como la clasificatoria de la Bandera de la Concha, en la que participarán esta tarde Puebla-Cabo, Náutico de Ribeira, Perillo y Mugardos, son fundamentales para «facer un efecto chamada a outras rapazas e clubs que queiran sumarse».

Las campeonas

El Club Náutico de Ribeira fue el vencedor este año de la liga autonómica. A pesar del éxito, sabe de la dificultad de construir un bloque que, en su caso, cuenta con remeras de todos los puntos de Galicia. «Queda moito por facer. Ata fai nada non tíñamos nin competicións. Non podemos querer hoxe todo», afirma Sandra Sánchez.

La entrenadora y a la vez remera destaca también la importancia de una mayor visibilización, además de la dificultad de «manter ás rapazas cando pasan de xuvenís. É unha idade complicada e moitas abandonan».

Jorge Hermida, técnico de la bancada de Mugardos, se mantiene en el guion de sus compañeros: «Estamos en Galicia y este no es un deporte multitudinario. Hay chicas que tienen ganas, pero después debe haber interés e infraestructura por parte de los clubes. No es fácil tener dos traineras en el mar, hace falta un apoyo económico importante».

Hermida pone en relieve la necesidad de fichajes y fusiones para confeccionar los bloques: «Todos vamos justos. El remo femenino está evolucionando, pero no podemos crecer en un año lo que a otros les lleva diez». Gelo Tarrío, presidente de Vilaxoán, incide en la idea de la cantera: «Es fundamental el equipo juvenil, pero si en chicos tienes 50, en chicas son 20. El margen es menor». Sin lanzar las campanas al vuelo, las cien guerreras ya demostraron que quieren seguir peleando. En sus manos está ahora ganarse el presente y el futuro.

Andrea Oubiña, la reina del banco fijo que busca conseguir su novena Concha

El palmarés de Andrea Oubiña (O Grove, 1990) no admite parangón. Suma ocho victorias en la Bandera de La Concha y seis títulos de Liga. Comenzó en uno de los clubes de su pueblo (Amegrove) y formó parte, ya en la categoría sénior, de aquella bancada de Samertolomeu que dominó las primeras ediciones de la Liga Euskotren. En verano del año 2015 llegó una llamada desde Guipuzkoa que le hizo dar el salto a la tripulación de San Juan. Allí ha encadenado tres títulos más, el último de ellos este año, con una solvencia y una superioridad incontestables. Y con una ambición también exagerada. «Un dos nos obxectivos deste ano era gañar todas as regatas da Liga», confesaba a La Voz hace un par de semanas. Se quedaron a las puertas de lograrlo.