Una campaña de la centolla histórica entra en su recta final

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBERIA / LA VOZ

RIBEIRA

MARCOS CREO

Los kilos subastados, por encima de los 120.000, suponen casi el triple que el año anterior

12 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta es la última semana de la campaña de la centolla, que estará en veda hasta mediados de noviembre. Sin duda, se trata de uno de los períodos más fructíferos de captura de esta especie, ya que a las lonjas barbanzanas han llegado prácticamente el triple de kilogramos que en el ejercicio pasado. La causa de este sustancial incremento debe buscarse, por una parte, en la escasez de pulpo, lo que forzó a muchos naseiros a sustituir el cefalópodo por el crustáceo. Además, el marisco abundó y la cotización se mantuvo bastante bien, según indican representantes del sector.

Desde que abrió la actual temporada, y hasta la pasada semana, por las lonjas de Aguiño, Carnota, Muros, Rianxo y Ribeira pasaron un total de 121.400 kilogramos, frente a los 44.200 que se comercializaron durante la misma franja de tiempo de la campaña anterior.

Dos son las rulas que marcan la diferencia: Ribeira, que supera los 70.000 kilos y, especialmente Muros, que ha pasado de los 6.012 kilos conseguidos en la temporada 2016-2017 a los más de 44.000 de esta. Eso sí, en esta última lonja el incremento de capturas tuvo una fuerte repercusión en los precios. El valor medio osciló entre los 4,95 y 5,32, frente a los 8,20 y 8,24 del período precedente.

Recurso seguro

Entre quienes decidieron concentrar sus esfuerzos en la centolla se encuentra Francisco Fernández, quien explica que solo se dedicó un par de semanas a coger pulpo porque la cantidad que lograba traer a tierra era tan pequeña que ni con el alto precio le compensaba.

También el profesional Emilio Olveira tomó una decisión parecida: «Este ano decidimos dedicarnos á centola porque había pouco polbo». En cuanto a los precios, subraya que «foron razoables e había bastante cantidade de marisco. Nuns sitios abundaba máis que noutros, pero, en xeral, ben».

En el caso de Ribeira, representantes de la rula explican que durante el mes de mayo el crustáceo alcanzó, en cuatro jornadas, una cotización máxima de 25 euros. La media fue de 7,4.

El período de veda vuelve sembrar discrepancias en el sector

La veda comenzará el 17 de junio y se prolongará hasta el 12 de noviembre. Sin embargo, el período establecido vuelve a sembrar las discrepancias en el sector. Esta cuestión se abordó hace unos días, en el transcurso de una reunión mantenida por la Federación de Confrarías de A Coruña, que preside el patrón mayor de Muros, Daniel Formoso. El dirigente manifestó: «Moita xente considera que xa tiña que estar pechada».

También explicó que varios pósitos reclamaron que la prohibición para coger esta especie se iniciase en mayo. Sin embargo, las fechas se mantendrán como en temporadas pasadas.

Por lo que respecta al inicio, sucede algo parecido, ya que un número considerable de profesionales creen que debería esperarse hasta diciembre «canto máis avanzado está o ano, mellor está a centola», subraya Daniel Formoso. Sin embargo, recalca que los acuerdos se adoptan por mayoría.

Además, quienes reclaman un período más prolongado de cierre dicen que el producto también se revaloriza.

Aumentan los profesionales que proponen devolver al mar las hembras durante unos meses

Bien sea por el aumento de la temperatura del agua o por el cambio en las condiciones climatológicas, lo cierto es que son bastantes los productores que indican que la centolla lleva ya algún tiempo desovando. Según la normativa, no pueden cogerse ejemplares con huevas, pero varias voces señalaron que sí que se capturan y que se limpia el crustáceo para que no se note. Con el fin de preservar la especie, hay un número creciente de profesionales que solicitan el establecimiento de unos meses en los que sea obligatorio devolver las hembras al mar.

La propuesta fue abordada durante la reunión de la Federación de Confrarías de A Coruña y Daniel Formoso comentó que se incluyó en el informe remitido a la Consellería do Mar: «Agora deberá ser a Xunta a que decida».

Formoso comentó que se trata de una medida conservacionista y que quienes apuestan por ella se decantan por prohibir la captura de hembras entre los meses de abril y junio.