Malestar entre los empresarios de Ribeira por la puesta en libertad de los acusados de la ola de robos

S. Gómez

RIBEIRA

MARCOS CREO

Un local de Corrubedo sufrió la segunda sustracción del año al serle forzada una máquina de tabaco

06 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La oleada de robos que se ha vivido en las últimas semanas ha despertado el malestar entre los empresarios de Ribeira. Aunque la detención por parte de la Policía Nacional de los presuntos responsables acalló las voces más críticas, su inmediata puesta en libertad ha vuelto a reabrir la caja de Pandora. Durante la madrugada de ayer, dos establecimientos sufrieron sendos robos, suficientes para echar más leña al fuego.

«Non é unha cuestión da policía, que sabemos que está vixiando, nin do xuíz que interpreta a lei. O problema é da propia lexislación. O malo é a impunidade que percibimos dende a rúa», apunta, Antonio Lijó, uno de los pocos empresarios que accede a dar la cara para valorar los episodios de las últimas semanas.

En alerta

Muchos de los propietarios de los negocios han optado por reforzar la seguridad en sus establecimientos, con el coste económico que esto conlleva. La mayoría apuesta por instalar cámaras de vigilancia, aunque otros incluso se han quedado a dormir en los establecimientos.

A pesar de estas medidas, los ladrones siguen haciendo de las suyas. Por ejemplo, uno de los robos de ayer se registró en un establecimiento de Corrubedo que ya había sufrido una sustracción de este tipo a principios de año. En esta ocasión, reventaron una ventana y la máquina de tabaco. El otro robo fue en un local de Oleiros, cerca del hospital comarcal, en el que forzaron una máquina expendedora de bebidas para llegar al cajetín interior.