Licores de Carballo y vinos de Rianxo y A Pobra, en el Fórum Gastronómico de Barcelona
RIANXO
Turismo a toda costa | Las empanadas carballesas de Costume arrasan entre los visitantes en Barcelona
08 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Alberte Varela Amado es de Balarés, en Cospindo (Ponteceso), y junto a su mujer Natividad Chouciño tiene una empresa de distribución de vinos llamada Choiva. Como los vinos son de todas las denominaciones, zonas y producciones gallegas, el nombre es un buen reclamo, pero además coincide con los apellidos de los propietarios, Chouciño y Varela. A más de un profesional le explicarán estos días en el Fórum Gastronómico de Barcelona esta y otras curiosidades, además de detalles eruditos sobre el vino en Galicia, pero sobre todo les mostrarán los vinos que han llevado a la gran feria internacional. Y como lo hacen bajo el auspicio de la Vicepresidencia de la Deputación (área de Turismo), los escogidos han sido, lógicamente, producciones provinciales: de Betanzos, de A Pobra do Caramiñal y de Rianxo. Estos dos últimos, muy relacionados con los zorros en sus nombres: Vulpes Vulpes y Cazapitas. Y con la «uva típica coruñesa, a do branco lexítimo».
Alberte, que tiene su centro de distribución en A Coruña, también puede hablar de un proyecto de investigación y desarrollo que tiene como epicentro Buño: cómo aprovechar su barro y la experiencia de sus artesanos (y de las nuevas generaciones) para construir tinajas para que madure el vino. Es algo que ya existe en otras zonas, pero no con barro y manos locales, y ahí hay una opción de explorar nuevos productos, con ediciones especiales y diferenciadas que tanto valoran cada vez más clientes. De momento, está en fase de pruebas con dos tinajas, una de cinco litros y otra de tres, con vino de Ribeiro. Y a ver qué pasa: «É un proxecto a longo prazo», explica su impulsor.
También sabe mucho de arriesgar Borja Bello Blanco, de Carballo, que está dando a conocer los licores que llevan su nombre, y cuya elaboración le ocupa todo el día. «As 24 horas, e máis que tivera o día», bromea (o no). Empezó justo con la pandemia, que le retrasó sus planes, y fue a finales de ese año 2020 cuando pudo sacar las primeras botellas a la venta. Salvo destilar (la materia prima viene de O Barco), lo hace todo: almibares, maceración, filtrado, empaquetado, comercialización, distribución... Tiene de arándanos, de café (sin azúcar) y café descafeinado. Vende gracias a su web, a negocios y tiendas gourmet, a contactos que realiza por ejemplo, en citas como la de estos días en Barcelona... Es curioso que la idea surgió cuando trabajaba en Barcelona. Empezó casi de casualidad, practicando, aprendiendo cada día, y ahora el resultado es un producto exclusivo y muy elaborado que se está haciendo un hueco importante.
Tiene ya más experiencia Paco Fraga, de A Laracha, pero con nave en el polígono de Carballo. Ahí está su empresa, Costumes Empanadas de Galicia, que vende a toda España y ahora que empieza a abrirse con fuerza al mercado internacional (puede que incluso a California, hay contactos). Paco, tercera generación ya de conocidos panaderos laracheses, lo apostó todo a las empanadas y le salió bien. Son ya diez personas trabajando, que elaboran mil kilos al día. Preparan quince sabores y variedades diferentes (también veganas) que venden a profesionales de todo el país. En tres tamaños diferentes, redondos y rectangulares. La empresa no para de crecer. Si hay que hacer caso a las numerosas personas que ayer degustaban y opinaban sobre su producto, se entiende perfectamente ese avance. «O cliente que colle esta empanada fidelízase, gusta moito. Todo artesán, a man», señala. Valora las oportunidades que le dan ferias como esta barcelonesa, una de las tres a las que no falla en todo el año. «O resto do tempo estou traballando facendo empanadas», asegura.
Los anteriores son solo algunos de los ejemplos de la zona que aprovechan el multitudinario y mediático foro del recinto ferial de Montjuich, en Barcelona, para hacer patria y negocio con sus productos. La gastronomía es la que manda, pero la vertiente turística también es destacada a la hora de promocionar un destino que, a sus cualidades ya conocidas, suma las de una cocina de excelencia.