Tenía 96 años y una salud de hierro, pero una caída desencadenó el fatal desenlace
22 ene 2021 . Actualizado a las 19:46 h.Estaba cerca del siglo de vida, pero aún no hace muchos días que Manuel Gómez Pérez se paseaba por la nave de Autocares Muiños, la empresa que dirigió durante casi 50 años, para charlar con los conductores y ver de cerca los autobuses. Llevaba el oficio en el ADN y nunca llegó a desligarse de un negocio familiar que ha perdido a su columna maestra. Pese a su avanzada edad, el vecino de Taragoña tenía una salud de hierro, pero complicaciones derivadas de una operación a la que tuvo que someterse tras una lesión en el fémur debido a una caída puso el punto final a su historia.
Dicen quienes lo conocían que Manuel Gómez vivió para sus autocares, una empresa de la que cogió las riendas en 1950, tomando el relevo de su suegro, Manuel Gómez Mayán, que la había fundado dos décadas antes. Se encargó de la gerencia hasta finales de los 90, cuando el negocio familiar se transformó en una sociedad limitada, de la que él siguió formando parte. La pasión que sentía por el sector se la supo transmitir a los suyos. Uno de sus nietos, César Tubío, lleva ahora las riendas de Autocares Muiños, mientras que otro fundó en A Pobra Autocares Barbantia.
Además de por su empresa, Manuel Gómez se desvivió por su familia, formada por dos hijas y cinco nietos. Con su marcha se rompe el que era el matrimonio más longevo de Rianxo, que el empresario formaba junto a Gumersinda Gómez Durán, de 95 años.
El funeral por la muerte de Manuel Gómez tendrá lugar esta tarde en la iglesia de Taragoña. El traslado desde el tanatorio de Rianxo está fijado para las 17.15 horas.