El pósito de Rianxo lamenta que los problemas burocráticos retrasen un semillero de almeja

La actividad marisquera es una importante fuente de ingresos para muchos vecinos de la comarca de Barbanza. Son miles los mariscadores que viven de este trabajo, que está atravesando un mal momento como la mayoría de los sectores económicos gallegos. Ante esta situación, los colectivos y entidades buscan mejorar sus ingresos o aumentar la producción de bivalvo y su cotización. El pósito de Rianxo ha puesto en marcha un proyecto para incrementar el marisco en sus arenales y está trabajando para contar con una batea de preengorde de almeja.

El patrón mayor, Miguel Ángel Iglesias, señaló que la entidad cuenta con una plataforma flotante frente a la fachada marítima de la localidad, donde hacen los controles de los mariscadores cuando regresan a tierra. La intención del pósito es transformarla en una batea de preengorde de almeja con la finalidad de sembrarla después en sus concesiones.

La cofradía incluso presentó un proyecto a la Consellería do Mar para conseguir una ayuda financiera, que le fue concedida en su momento. Sin embargo, cuando empezaron con la tramitación oficial para contar con los correspondientes permisos: «Atopámonos coa burocracia. Estanos a ser complicado a súa autorización», comentó el dirigente rianxeiro.

Documentación

Miguel Ángel Iglesias destacó que llevan varios meses con la documentación presentada ante Portos de Galicia: «Ata o momento todo é negativo. Non nos conceden permiso».

Los trámites comenzaron hace tiempo y, a pesar de que ya les rechazaron la posibilidad de convertir la batea en un semillero, lo seguirán intentando. El dirigente considera que es muy necesario para los intereses del colectivo marisquero de la localidad.

El patrón mayor comentó que la intención de la entidad marinera es producir unos tres millones de unidades de almeja al año, que después serían esparcidas por las diferentes autorizaciones de la entidad.

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