Por sus especiales características y su configuración, en la comarca hay concellos en los que los vecinos son más propensos a rehabilitar edificios. Como no podía ser de otro modo, en este apartado, Muros y Rianxo son los dos grandes protagonistas, amparados también por ser reconocidos como áreas de rehabilitación integral, lo que permite a los particulares obtener diferentes ayudas para sufragar las obras.
En el caso de la localidad muradana, las rehabilitaciones superaron incluso a la construcción de viviendas de nueva planta, ya que en la última década se registraron 58 intervenciones de remodelación por 56 edificaciones levantadas.
Lo que ocurrió en Rianxo no llegó a ese extremo, pero sí que es significativo. En el concello rianxeiro se rehabilitaron 47 viviendas y se construyeron 79 nuevas. También en A Pobra se notó esta tendencia el pasado año, ya que la cifra de las dos actuaciones es similar. Luego hay casos como el de Lousame, donde en el 2018 no se construyó ninguna casa de nueva planta, pero sí se acondicionó una.