Los portavoces de la oposición criticaron que no se les había tenido en cuenta a la hora de repartir estas retribuciones
20 jul 2019 . Actualizado a las 13:34 h.Rianxo no iba a ser una excepción y, como ha ocurrido en todos los plenos organizativos que se han celebrado en la comarca, el punto relativo a las dedicaciones -dos exclusivas y tres parciales- fue el que motivó una mayor polémica en el pleno celebrado ayer por la tarde, y en el que finalmente los votos de la alianza entre BNG y PSOE permitieron sacar adelante la propuesta, que no contó con el apoyo de ningún grupo de la oposición.
De esta forma el alcalde, Adolfo Muíños, percibirá 45.000 euros brutos anuales repartidos en 14 pagas, mientras que la socialista Carmen Figueira, responsable de las áreas de Urbanismo, ARI, Desenvolvemento Local, Comercio e Emprego, ingresará 39.000; y los concejales de Benestar Social, Hadriana Ordóñez; Deportes, Xusto Xosé Ordóñez; y Educación, Adelina Ces, tendrán una retribución parcial de 13.000 euros.
El más crítico con este punto fue el portavoz de Rianxo en Común, Julián Bustelo, quien recriminó al ejecutivo su falta de transparencia y de diálogo a la hora de elaborar esta propuesta. «O pouco que sabiamos fómolo coñecendo pola prensa, pero ninguén nos informou de quen estaba detrás desas dedicacións ou os seus perfís. Estamos a favor de que a actividade política sexa retribuída, pero non deste xeito», criticó.
El concejal del Partido Popular Germán Allut también cuestionó el incremento en el número de retribuciones, «xa que se pasou de pagar 75.000 a 124.000 euros, o que supón un 70 % máis»; una opinión compartida por la portavoz de Ciudadanos, Sara Resúa, quien aprovechó para criticar a la cabeza de lista socialista por su cambio de postura ahora que forma parte del ejecutivo.
Propuestas constructivas
Carmen Figueira se defendió alegando que su concejalía asumía unas áreas muy importantes y con retos muy ambiciosos. Además, animó a todos los grupos de la corporación a hacer propuestas constructivas, «porque non imos mirar de onde veñen, senón o que poden achegar para impulsar Rianxo».
El último en intervenir fue el regidor, que reconoció que a la hora de hablar de dedicaciones todo se ve distinto si se está en la oposición o en el equipo de gobierno, y que él tenía experiencia en los dos bandos para saber de qué hablaba. Adolfo Muíños insistió en que se trata de sueldos con una cuantía razonable, sobre todo teniendo en cuenta la carga de trabajo que tienen que realizar. También recordó que están por debajo de los de otros concellos con similar número de habitantes, y que se decidió no contratar a personal de confianza.