La Xunta archiva tres expedientes contra rañeiros de Carril por no pasar el control en la batea de Os Lombos
RIANXO
El cambio de gestión de los bancos de libre marisqueo de la ría de Arousa abrió una profunda brecha entre las cofradías integradas en Rañeir@s Ría de Arousa y aquellas otras que, como Carril, se mostraron abiertamente contrarias a dejar la gestión de las principales zonas en manos de esta organización
08 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El cambio de gestión de los bancos de libre marisqueo de la ría de Arousa abrió una profunda brecha entre las cofradías integradas en Rañeir@s Ría de Arousa y aquellas otras que, como Carril, se mostraron abiertamente contrarias a dejar la gestión de las principales zonas en manos de esta organización. Ese enfrentamiento de fondo cristalizó en un ronsel de conflictos, como los expedientes abiertos por vigilantes de la cofradía de Rianxo contra varios rañeiros carrilexos que los días 7 y 13 de noviembre del pasado año se negaron a pasar el punto de control de capturas habilitado en una batea. La Xunta ha resuelto tres de esos casos, y lo ha hecho dándole la razón a los rañeiros carrilexos.
Estos, en las alegaciones presentadas en su día con el respaldo de la cofradía de Carril, esgrimían tres argumentos fundamentales. El primero, «no momento no que ocorreron os feitos aínda non figuraba determinado o lugar de control establecido polo correspondente plan de xestión».
Pendiente de una reunión
Ese asunto, dicen acto seguido los escritos de descarga, «estaba pendente dunha reunión entre a consellería e as diversas confrarías afectadas para regular os puntos de control». Por último, indicaban que «os vixiantes da confraría de Rianxo -que fueron quienes interpusieron las denuncias- carecen de competencia para denunciar fóra do seu ámbito territorial de actuación».
Estos argumentos, concluye la Xunta en los tres casos, «deben ser estimados». Mar se remite para ello a un informe del jefe de la Unidade de Gardacostas de Vilaxoán, conforme al que «para o ano 2018 non existe ningunha disposición regulamentaria que obrigue ás embarcacións que faenan nestas zonas a pasar por eses puntos de control». Dicho documento reconoce que en años anteriores, para ese banco marisquero «existían medidas específicas de extracción e control», pero no así para el 2018. Así que, aunque las cofradías afectadas y vinculadas a Rañeir@s acordaron realizar los controles en las bateas, «non existía ningunha disposición regulamentaria que obrigue ás embarcacións que faenan nesas zonas a pasar por eses puntos de control».
Sin normativa
En definitiva, concluyen los informes de Mar, «na data en que concorreron os feitos reprochados non existía (ou non existía todavía) unha regulación específica para o punto de control de obrigado cumprimento, xa que tal circunstancia estaba pendente de concretarse nunha reunión entre autoridades da consellería e os representantes das confrarías».